Organizaciones humanitarias alertan de que Sudán "se está tambaleando en el precipicio de una de las peores crisis de hambre".

El Consejo de Seguridad adoptó, por 14 votos a favor y una abstención de Rusia, una resolución que pone fin a su mandato a partir del domingo.

El 70% de las instalaciones sanitarias en zonas de conflicto se encuentran fuera de servicio.

En riesgo 333 mil que nacerán antes que termine el año.

Los ataques fueron en varios barrios residenciales y mercados en las ciudades sudanesas de Jartum y Omdurmán.

La estimación de quienes huyen de la violencia es aproximadamente el doble de lo previsto por ACNUR en mayo, poco después de que comenzó el conflicto, y supone un aumento de 600.000 personas.

Darfur Occidental, ha sido el escenario de enfrentamientos étnicos desde hace décadas y del conflicto entre el Ejército y paramilitares que estalló en abril.

El conflicto también ha provocado brotes de enfermedades y un aumento de la desnutrición, según William Spindler, vocero de la ACNUR.

Sudán se sumió en el caos a mediados de abril, cuando las tensiones entre el ejército y un grupo paramilitar rival, las Fuerzas de Apoyo Rápido, estallaron en combates abiertos.

Las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), en guerra con el ejército desde el 15 de abril, denunciaron "la trágica pérdida de más de 31 vidas y muchos heridos".

Murieron 12 civiles en Darfur, informan testigos de la violencia.

El conflicto estalló el 15 de abril entre el ejército, dirigido por el general Abdel Fatah al Burhan, y los paramilitares de las FAR, lideradas por el general Mohamed Hamdan Daglo.

La violencia se desencadenó tras el apuñalamiento el jueves de una joven de 14 años de la etnia Shilluk en el campo de Malakal.

El conflicto entre ambos bandos ha dejado más de 500 muertos, principalmente en la capital Jartum.

Si persiste la violencia se irán del país africano en busca de seguridad, dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados.

Cinco mil estadunidenses se han puesto en contacto con sus autoridades para poder salir de la nación africana, informó el Departamento de Estado.

El Aíd marca el fin del mes sagrado musulmán del Ramadán

Medios locales de comunicación reportaron siete fallecidos y 81 heridos en el aeropuerto de Jartum, capital sudanesa.

Al parecer el buque viaja por arriba de su carga máxima. La tripulación y algunos animales fueron rescatados.

Uno de los enfrentamientos dejó 98 heridos. La ONU pidió una investigación.

El Programa Alimentario Global señaló que se trata de una urgencia alimentaria que afecta a más del 70 por ciento de la población.

Las protestas, que fueron dispersadas con gases lacrimógenos, dejaron saldo de 85 detenidos, informó el sindicato de maestros, que participó en la movilización.

A dos años del derrocamiento del dictador Omar al-Bashir, el país africano trata de integrarse a las actividad internacional.