"Algunas tensiones comienzan a aparecer" en la economía estadunidense, con disminución de la demanda y desaceleración del empleo, dijo la portavoz del FMI, Julie Kozack.
El índice llegó a 60.5, un aumento de casi 16% intermensual. Consumidores "aún creen que existe una alta probabilidad de que la economía se deteriore".