Pablo Lemus señaló en días pasados que un grupo de unas 50 personas había sido enviado a la entidad para causar destrozos en la marcha del pasado 15 de noviembre.
Claudia Sheinbaum recordó la declaración del dirigente del PAN, Jorge Romero, quien en una entrevista afirmó que “a la oposición lo que le faltaba era la violencia”.
Integrantes del Colegio Nacional de Voces Jurídicas señalaron que el Estado cuenta con capacidad para ubicar a los responsables y cuestionaron que las autoridades afirmen desconocer a los grupos encapuchados.
La mandataria también se refirió a que uno de los detenidos en la movilización del 15 de noviembre sería delegado en Cuauhtémoc del Consejo Nacional blanquiazul.
Los familiares insisten –en varios casos– que sus hijos no participaron en los disturbios y fueron detenidos de forma aleatoria cuando los agentes recibieron la orden de capturar a los encapuchados.
Con apoyo internacional la estrategia de la ultraderecha pretende crear una falsa imagen de inestabilidad y violencia en el país, pero la Presidenta cuenta con el respaldo de su movimiento: Adán Augusto.
Se trata de una operación articulada, financiada y amplificada por actores políticos, empresariales y mediáticos de derecha nacionales e internacionales.
El sábado pasado, Víctor Manuel Camacho, reportero gráfico de este diario, fue agredido y despojado de su equipo por policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México mientras cubría las manifestaciones.
“No obstante, la Corte manifiesta su preocupación y condena las expresiones de violencia aislada registradas este día en sus inmediaciones, que incluyeron agresiones a elementos de seguridad, daños a las instalaciones e intentos de ingreso violento y no autorizado al edificio”.
La Coordinación de Infodemia del Gobierno Federal reveló que 179 cuentas en TikTok impulsaron el lanzamiento de la convocatoria. De ellas, al menos 28 tienen administradores en el extranjero, principalmente en España, Estados Unidos y Bolivia.
“Unos cuantos mayores de edad, no necesariamente de esa generación, la están promoviendo o aprovecharon la convocatoria”, por ello, reiteró, “es fundamental saber quién está convocando realmente”.
Vallas metálicas han sido colocadas por policías de la CDMX para impedir el paso hacia la Catedral y el recinto oficial del Gobierno. También están bloqueadas las calles de Moneda y Corregidora, al igual que toda la plancha de la Plaza de la Constitución.
La inseguridad en la nación andina ha derivado en múltiples manifestaciones encabezadas por el colectivo Generación Z, quienes muestran su rechazo al Congreso y al nuevo gobierno del derechista, José Jerí.
La bandera, de una calavera con sombrero de paja, se ha convertido en un emblema de guerra para la Generación Z peruana, que afirma que está luchando por un futuro libre de corrupción en Perú que ha tenido hasta seis presidentes desde el 2018.