"Hemos medido la posición de las galaxias en el espacio y tiempo, ya que cuanto más lejos están, más retrocedemos en el tiempo", dice la investigación.

Las teorías convencionales sobre los agujeros negros suelen explicar cómo los agujeros negros estáticos o giratorios pueden existir por sí solos, aislados en el espacio.

NGC 6652 se encuentra en la Vía Láctea, en la constelación de Sagitario, a menos de 30 mil años luz de la Tierra.

Fue lanzado por SpaceX hacia su destino final a 1.5 millones de km de distancia. Tardará un mes en llegar y 2 meses más para iniciar su misión de 6 años.

Sagitario A* experimentó un potente estallido de actividad tras devorar los objetos cósmicos a su alcance.

La detección de ondas gravitacionales en 2015 sacudió el mundo de la astrofísica, porque confirmó la existencia de agujeros negros.

Bautizada JADES-GS-z13-0, se formó "320 millones de años después del Big Bang" y su luz es la más distante observada hasta la fecha.

Parecen haber sido formadas a un ritmo mucho más rápido que lo que predecían los astrónomos, según un estudio.

Los europeos proporcionan la mitad de las naves espaciales que llevarán al satélite de la Tierra en futuras misiones, dijo Marc Steckling, del gigante aeroespacial Airbus.

Fue la primera operación conjunta entre la JAXA y la NASA; desde 1992 hasta octubre de 2022 recopiló datos sobre la magnetosfera de la Tierra.

Después de 2030, el laboratorio será precipitado al océano.

Muchas constelaciones podrían haberse formado antes de lo que se pensaba, dijo Haojing Yan, de la Universidad de Missouri, EU.

Hay indicio de haber hallado constelaciones formadas 350 millones de años después del ‘Big Bang’; hacen falta más observaciones para acreditar el récord.

Registra temblores periódicos desde febrero de 2019. Tiene movimientos como la Tierra.

El telescopio revela galaxias masivas en formación, alrededor de un cuásar de un rojo intenso.

Cada toma del telescopio James Webb es “un nuevo descubrimiento”. Da una visión a la humanidad del universo “que nunca antes hemos visto".

La fuente de la señal es el magnetar, una estrella de neutrones de pequeño tamaño pero con una masa de millones de toneladas.

Es el resultado del trabajo de cientos de astrofísicos de todo el mundo, tras el análisis de cuatro millones de galaxias y cuásares.