Ciudad de México. Integrantes de diversas organizaciones sociales realizaron este sábado una manifestación frente al Hemiciclo a Juárez para exigir que se permita llegar con seguridad a la franja de Gaza a una flota de alrededor de 80 barcos con delegados de varios países —entre ellos ocho ciudadanos mexicanos—, quienes buscan entregar ayuda humanitaria y visibilizar el “genocidio” cometido por Israel contra el pueblo palestino.

En medio de consignas como “a romper, a romper relación con Israel” y “No es una guerra, es genocidio”, los participantes realizaron actividades culturales y bloquearon la circulación vehicular de avenida Juárez, a la altura del Hemiciclo, rebautizado por colectivos civiles como “Plaza Palestina Libre”.

De igual forma, acusaron a la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Presidencia de la República de no responsabilizarse por la seguridad e integridad de los mexicanos que se dirigen en este momento a Gaza, ni haber respondido las cartas que se les dirigieron con esa petición.

Adrián Nárez, integrante de la organización Global Movement to Gaza México, detalló que los navíos que forman parte de la llamada Flotilla Global Sumud todavía se encuentran en las costas de Túnez, donde por motivos técnicos y por las condiciones tanto marítimas como de seguridad, aún no han podido zarpar rumbo a la franja de Gaza, lo cual se espera que ocurra en los próximos días.

La eventual llegada de los barcos a costas palestinas, dijo el activista, “sería un hecho histórico. En anteriores veces ha habido tres o cuatro excursiones de la misma naturaleza, pero el número pequeño de barcos y de personas ha provocado que les sea prácticamente imposible llegar”.

Por tal razón, en esta ocasión el objetivo es que, si las fuerzas militares de Israel logran detener a varios navíos, no sean capaces de frenar a todos, “y aunque así fuera, se espera retomar una acción muy similar, pero con más barcos”.

Hasta el momento, abundó, se tiene registro de ocho delegados mexicanos que están a bordo de las embarcaciones que buscan llegar a Gaza, a quienes se les da un monitoreo de seguridad para cerciorarse de que se encuentran bien.

“La idea de la flotilla es, tanto entregar ayuda humanitaria, como visibilizar que ante gobiernos inactivos, somos totalmente capaces como sociedad de organizarnos para generar cambios. Aunque nos sintamos muy pequeños e insignificantes, la asociación puede generar un cambio muy grande”, enfatizó.

Nárez puso de relieve que, “ante la inconformidad de ver un genocidio televisado, decidimos acercarnos, comunicarnos y lograr una organización eficaz”, y aunque reconoció que la travesía no está exenta del riesgo de ser agredida por Israel, “esa inseguridad de los delegados que están en alta mar no se compara con el terror que están viviendo en carne propia los palestinos”.

El activista señaló que, aunque pueda parecer que lo ocurrido en Medio Oriente no tiene nada que ver con México, el gobierno de Tel Aviv tiene relación con el de nuestro país en materia de tecnologías de administración del agua, además de que sus militares entrenan a uniformados mexicanos.

Por lo anterior, enfatizó la necesidad de que México rompa relaciones diplomáticas con Israel, para repudiar las agresiones que dicho país ha cometido contra Palestina.