A las 9:25 de la noche Marta López y sus vecinas Lola, Laura y Carolina llegaron a la zona siniestrada del distribuidor puente la Concordia para ofrecer a los trabajadores y personas 40 litros de café y teleras que compraron cerca de su domicilio, ubicado en la colonia San Miguel Teotongo.
Marta dijo que "es solidarizarnos con todos", con los trabajadores que siguen laborando entre ellos personal de limpia, de Protección Civil, policías y hasta de personas que se acercan al lugar.
Relató que "sentimos feo, aunque las personas no sean de nuestra familia, por ejemplo yo no encontraba a mi papá porque se vino caminando desde Guelatao hasta Los Reyes", ante la falta de transporte público.
Mientras Yoatzin llegó de Ixtapaluca para ofrecer tortitas, tras relatar que venía a bordo del trolebús cuando ocurrió la explosión de la pipa.
"El conductor del trolebús detuvo se detuvo y lo primero que dijo fue que nos bajáramos porque había un atentado, todos nos bajamos corriendo y nos espantamos", comentó la joven.