Huehuetla, Hgo. Conmovidos por la tragedia que viven sus vecinos hidalguenses, habitantes de diversas comunidades del municipio de Pantepec, Puebla, se organizaron para recolectar y enviar víveres, agua, medicinas, ropa, productos de higiene, herramientas y plantas de luz a las comunidades afectadas de Huehuetla, entre ellas Acuautla, devastada por un alud de lodo y rocas provocado por intensas lluvias registras.
La ayuda solidaria también se ha extendido a San Antonio El Grande, San Gregorio y la cabecera municipal de Huehuetla, localidades que permanecen aisladas y donde los alimentos han comenzado a escasear.
Se trata, en su mayoría, de campesinos y pequeños comerciantes de escasos recursos del Ejido Cañada Colotla y de las comunidades de El Pozo, Acalmancillo e Ixtololoya, del municipio poblano de Pantepec, que colinda con Huehuetla, Hidalgo. Todos los días, a bordo de vehículos particulares, trasladan costales, cajas y paquetes con ayuda humanitaria hasta donde los caminos se vuelven intransitables por el lodo y las rocas. A partir de ahí, continúan a pie, emprendiendo largas y difíciles jornadas de caminatas por veredas serranas para llegar a su destino.
En una de las camionetas que transportaban víveres a San Antonio El Grande, se podía leer una cartulina con el mensaje:
“Ayudar al que lo necesita no solo es parte del deber, sino de la felicidad. El pueblo de El Pozo está con ustedes”.
Otra pancarta colocada al frente de una combi decía:
“Ayuda comunitaria Ejido Cañada Colotla, Pantepec, Puebla. Destino: Acuautla, Hidalgo”.
Estos mensajes sirven no solo como muestra de solidaridad, sino también como una forma de organizar el reparto equitativo de los productos recolectados. En cada caja y paquete, los voluntarios escribieron palabras de ánimo dirigidas a las familias damnificadas.
"El verdadero progreso social no consiste en aumentar las necesidades sino en reducirlas.Mucho ánimo pueblo de San Antonio. Atentamente pueblo de El Pozo", fue mensaje de ánimo que escribieron en una de las cajas con despensas para los damnificados.
Entre los donantes destacó la participación de un panadero y una vendedora de tamales, quienes, pese a las dificultades para llegar, se trasladaron hasta San Antonio El Grande para compartir gratuitamente sus productos. Además, enviaron cajas con pan dulce, bolillos y tamales oaxaqueños para que fueran distribuidos en Acuautla y San Gregorio.
También integrantes de la congregación evangélica Getzemani, de la localidad de El Pozo, se sumaron a la colecta y envío de alimentos. Para reunir los productos, las comunidades instalaron centros de acopio en sus delegaciones y, en muchos casos, compraron parte de los víveres con sus propios recursos.
Además de recolectar y enviar ayuda humanitaria, los pobladores poblanos se organizaron en cuadrillas de trabajo para colaborar en las labores de retiro de piedras y lodo en los caminos que conectan Pantepec, Puebla, con Huehuetla, Hidalgo, contribuyendo así a restablecer las vías de comunicación en esta zona serrana golpeada por el desastre.