Ciudad de México. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México aseguró el inmueble en el que se construye La Comer Del Valle, al iniciar la carpeta de investigación por el delito contra el ambiente en su modalidad de tala de árboles.
En la entrada principal ubicada en la calle Gabriel Mancera 1311, colonia Del Valle Sur, en Benito Juárez, personal de la FGJ colocó tres sellos en la que se indica el inicio de la carpeta de investigación con el número de expediente CI -FIDAMPU/A/UI-3 C/D/386/05-2022.
También se colocó una lona de tres metros de altura en la que la FGJ local indica que el inmueble quedó asegurado por "Delito Ambiental" y advierte "al que quebrante los sellos puestos por orden de la autoridad competente se le impondrá de dos a seis años de prisión y de 100 a 500 días de multa".
Una patrulla de la Policía Bancaria e Industrial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México resguarda el inmueble asegurado sobe la calle Miguel Laurent, donde la FGJ colocó otra lona y nueve sellos.
La FGJ a través de la Fiscalía en Delitos Ambientales y Protección Urbana (FIDAMPU) inició la indagatoria por la denuncia que presentaron vecinos de la Colonia del Valle Sur que se aferraron a una jacaranda, en la calle de Amores, para evitar que fuera talada el antepasado fin de semana.
La lona de la FJG quedó colocada a un costado de los anuncios en el que La Comer Del Valle Sur indica: "Este proyecto cuenta con autorización de impacto ambiental SEDEMA/DGEIRA/DEIAR/000025/2022".
Además de otra lona con el logotipo de la alcaldía Benito Juárez en el que asegura que cuenta con "manifestación de construcción tipo C ; RABJ- C-0015-22. Vigente del 15 de marzo de 2022 al 15 de marzo de 2025, para obra nueva de tienda de autoservicio con cuatro niveles, dos sótanos y 24,695.30 metros cuadrados de construcción".
Vecinos de la Colonia del Valle Sur presentaron la denuncia ante la FGJ y promovieron un amparo colectivo con al menos 650 firmas al asegurar que no tienen información de la alcaldía, de autoridades federales y locales sobre la tala de árboles y su impacto ambiental en la zona, ni de las acciones de mitigación, además de que ninguna autoridad les consultó acerca de la obra.
Acusaron que sobre la calle Gabriel Mancera plantaron dos cedros que se encuentran secos.