La estrategia de Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, está profundizando todos aquellos aspectos que dieron lugar a la crisis del neoliberalismo.
No hay razón para creer que, a pesar de que se considera “adalid de la paz”, continuará la fuerza bruta para eliminar a quienes considera sus enemigos, particularmente a Rusia, Irán y China