Ciudad de México. Un grito de cultura y de justicia por la comunidad oaxaqueña de Eloxochitlán resonó este miércoles afuera de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La colectiva Mazatecas por la Libertad instaló una carpa frente a la sede del máximo tribunal del país, donde exhibió una galería de códices gráficos que narran una década de lucha y persecución política y judicial, con más de 40 detenciones -la mayoría ya absueltos- y más de 200 órdenes de aprehensión contra integrantes de su comunidad; a esta jornada la denominaron “Faena internacionalista por el fin de la criminalización de Eloxochitlán de Flores Magón”.
Argelia Betanzos, familiar directa de los “presos políticos mazatecos”, abogada comunitaria e integrante de la colectiva, explicó a La Jornada que eligieron ese lugar porque la SCJN tiene facultades para trazar una ruta definitiva que ponga fin a la criminalización de los integrantes de la comunidad. Informó que ayer sostuvieron una primera reunión técnica con la Dirección de Atención Ciudadana, a la que acudieron también abogadas del Instituto Federal de la Defensoría Pública, instancia que desde 2022 lleva su defensa tras acreditar graves violaciones al debido proceso y la fabricación de delitos.
En el encuentro —relató—, el Instituto expuso que no existen pruebas que sostengan los delitos imputados ni la responsabilidad de las 14 personas que llevan una década en prisión, mientras que la Corte reconoció que el problema no radica en la defensa, sino en las injerencias externas que han obstaculizado el proceso.
Adelantó que hoy sostendrán una segunda reunión en la Corte, “con personas que tienen capacidad de decisión. Y nosotras esperamos que se trace la ruta definitiva para dar fin a la criminalización”. Entre los presos políticos, piden la liberación de uno de sus líderes, Miguel Peralta.
La abogada resumió que la persecución responde a un intento histórico del Estado por desarticular a la comunidad e impedir la defensa del territorio, del agua y del río.
Exposición
El Códice Katasindajín es un proyecto colectivo creado por una decena de artistas y mujeres mazatecas para narrar, en formato de “códice-cómic”, la historia de lucha y persecución que ha vivido la comunidad, contó la artista visual Mine Ante y académica de la UAM Iztapalapa, que participa en el proyecto.
Explicó que a través de 14 escenas agrupadas en ocho capítulos, el códice retrata la relación de la comunidad con el río y el territorio, su identidad colectiva, el enfrentamiento con el cacicazgo, la criminalización y el trabajo sostenido —principalmente de las mujeres— acompañado por redes de solidaridad y expresiones artísticas.
La obra también incluye críticas a la corrupción en instancias judiciales y gubernamentales que han obstaculizado el acceso a la justicia.