°C -
|

La Jornada

Últimas noticias
Anuncio
Anuncio

Bulo desestabilizador

Grupos de interés  buscan debilitar al actual gobierno mediante tácticas de desestabilización basadas en la desinformación. Estas acciones encuentran eco en organizaciones ultraderechistas vinculadas a Donald Trump, que ven amenazados los avances de México como referente de las izquierdas a nivel global. Foto
Grupos de interés buscan debilitar al actual gobierno mediante tácticas de desestabilización basadas en la desinformación. Estas acciones encuentran eco en organizaciones ultraderechistas vinculadas a Donald Trump, que ven amenazados los avances de México como referente de las izquierdas a nivel global. Foto Marco Peláez
26 de noviembre de 2025 00:02

Ninguna estrategia de comunicación funciona si no apela a por lo menos una emoción o sentimiento; por ello, cuando se manipula a la persona por medio de la culpa, su resultado suele ser el efectivo sometimiento de la voluntad de la víctima, algo de lo que ella no se entera. 

La extrema derecha no sólo conoce la estrategia, la aplica desde hace al menos 2 mil años mediante la misma herramienta con que logró el sometimiento de los antiguos mexicanos después de la llegada de los cristianos españoles: la evangelización, instrumento de conquista con que se controló la conducta gracias al miedo a la condena eterna y a la permanente búsqueda por redimirse de la propia naturaleza ante lo divino. 

Así como sucedió durante el periodo llamado de la Conquista, hoy el miedo continúa siendo, junto con el odio, herramienta para manipular conciencias y con ello provocar conductas como la violencia. Sembrar la percepción de pérdida de libertad puede generar síntomas patológicos adversos como enojo, tristeza o miedo, y en casos severos dificultad para pensar con claridad, alteraciones de la memoria, conductas agresivas e incluso desarrollo de creencias anormales. 

Las narrativas que plantean panoramas desastrosos en México se arraigan en grupos de personas que padecen miedos construidos en prejuicios, muchos heredados de generación en generación que se valen de elementos de identificación como el color de piel o la posición socioeconómica. Lo que sea identificado como distinto es aprovechado por quienes buscan confrontar como elemento potencialmente peligroso para valerse de una percepción construida por medio de elementos de comunicación que intenta establecerse, aunque sea falsa o al menos inexacta, como realidad. 

A ello se suman elementos pretenciosos dictados por una sociedad de consumo que impone como elemento de trascendencia lo que se pueda comprar. Mientras más caro y ostentoso sea el auto, el reloj o el teléfono celular, mayor es la apariencia de logro en su tenedor y, en demasiados casos también, la insatisfacción de aquellos a quienes se les implanta la idea de que la dignidad proviene de un poder adquisitivo sin importar que para alcanzarlo se traicionen principios. 

El pelear en contra de nuestra naturaleza con el afán de trascenderla termina, de manera irremediable, sometiéndonos a ella con consecuencias terribles; de ahí la doble moral de quienes predican con una mano mientras con la otra pecan, los mismos que se victimizan al mismo tiempo en que son victimarios y que con un falso discurso patriota parecen desear que a México le vaya mal. 

La noticia falsa es síntoma de un propósito que va más allá de engañar por engañar: busca dañar a una persona o a una causa. Mientras más creíble, más letal es la mentira; por ello se construye una operación por demás sofisticada para intentar dar credibilidad a un hecho, no importa qué tan inverosímil sea. 

Es más sencillo estar rodeados de mentiras que nos gustaría creer que de verdades que no queremos escuchar; por ello, si el contenido de la mentira beneficia a los intereses de quien la lee, es altamente probable que la dé por buena. Son muchos quienes se quedan con la noticia falsa, una que conviene a los intereses de unos pocos, lo que se logra debido a la infodemia y la manipulación de consciencias que ocasiona el apelar a las filias y fobias que, como el fanatismo, nublan la razón. 

Grupos de interés y la “opinología ilustrada” o los “siempre abajo firmantes” tienen un objetivo que los une: debilitar al actual gobierno. Para ello utilizan tácticas de desestabilización cuyo blanco principal es una población a la que buscan manipular mediante la desinformación, arma para intentar dar un golpe blando que ha encontrado eco en organizaciones ultraderechistas cuyo principal promotor es Donald Trump, y se sienten amenazadas por los logros del gobierno de México, lo que ha convertido a nuestro país en ejemplo de las izquierdas, no sólo en América Latina, sino en el mundo. 

Esta estrategia desestabilizadora, de manual de guerra silenciosa, utiliza en su operación un hecho violento sucedido en alguna población de México para replicarlo bajo el discurso de que el suceso representa la totalidad del territorio. ¿El daño al gobierno de la presidenta Sheinbaum? 

Más allá del discurso agorero, la Estrategia Nacional de Seguridad ha logrado mediante la coordinación con gobiernos estatales y municipios, incluidos los gobernados por la oposición, una disminución considerable en la comisión de delitos bajo el reconocimiento de que aún hay un largo camino que recorrer. 

El gobierno actual goza de amplia aceptación y popularidad en la población, por lo que a diferencia de lo sucedido en otros países de la región ante acciones desestabilizadoras, es difícil que intenciones injerencistas, aun con participación de grupos opositores mexicanos, tengan el impacto que buscan.

Imagen ampliada

México: piensa mal y acertarás

Conviene cerrar un ojo frente a los que dicen estar contra “todas las ideologías”. Con excepción de la propia, claro.

Adviento a la puerta

Que cada quien celebre como quiera, o no celebre, la temporada por venir. Una posibilidad de ir más allá de los ánimos fiesteros es mirar con detenimiento lo que pasó en un establo.

Bulo desestabilizador

La noticia falsa es síntoma de un propósito que va más allá de engañar por engañar: busca dañar a una persona o a una causa.
Anuncio