Zacatecas, Zac. Decenas de frijoleros provenientes de la principal zona de producción de esta leguminosa en el país, el noroeste de Zacatecas, tomaron la sede de la legislatura estatal, donde tiraron y dejaron esparcidos varios cientos de kilogramos del grano, en protesta porque el gobierno de David Monreal Ávila no ha cumplido con la apertura de los centros de acopio que prometió habilitar, desde el 10 de noviembre pasado.
A finales de octubre –en pleno periodo de la cosecha de frijol del ciclo primavera-verano, que se prevé será de unas 350 mil toneladas–, el mandatario morenista anunció que el 3 de noviembre la Secretaría del Campo (Secampo) comenzaría la distribución de decenas de miles de costales para que los campesinos almacenaran su grano, y el 10 de noviembre serían abiertos los 52 centros oficiales de acopio, donde se recibiría la cosecha de productores a un precio de 27 pesos el kilogramo.
Sin embargo, a la fecha, la mayoría de los centros de acopio siguen cerrados, y la costalera tampoco se ha distribuido en los municipios productores: Sombrerete, Sain Alto, Río Grande, Miguel Auza, Juan Aldama, Nieves y Fresnillo.
La falta de los centros de acopio tiene desesperados a los agricultores, que a la fecha enfrentan deudas, y necesitan liquidez para pagar la trilla, enconstalado de frijol y el transporte del grano.
En contraparte, son los grandes acopiadores privados, los “coyotes”, quienes han aprovechado esta situación, pues ante la premura por la falta de dinero, los labriegos se ven obligados a vender el frijol entre cinco y ocho pesos el kilogramo, y no en 27 pesos como lo prometió la presidenta Claudia Sheinbaum.
Por ello, ayer, sorpresivamente, un numeroso grupo de productores, encabezados por el ex dirigente estatal de los frijoleros en la entidad, Ramiro Hinojoza –alcalde de Sombrerete por Morena y quien solicitó al cabildo licencia temporal al cargo, para encabezar la protesta de los agricultores–, arribaron al Congreso para exigir a los diputados su apoyo urgente para la apertura de los centros de acopio, y se respete el precio de 27 pesos el kilo.
“Estamos aquí para levantar nuevamente la voz y decirle a nuestra Presidenta que a pesar de la buena voluntad que ella tiene, en Zacatecas sus funcionarios la están engañando, porque no están respetando el precio de frijol”, reclamaron.
Cuando los campesinos ingresaron al vestíbulo de la legislatura, personal de seguridad cerró con llave las puertas de acceso a la sala de plenos, donde estaban los diputados a punto de iniciar la sesión ordinaria del día.
Los labriegos querían entrar hasta la tribuna, para tomarla y desde ahí, pronunciarse sobre su problemática, por lo que les indignó que no les permitieran el paso y vertieron varios bultos de frijol negro en el piso de esa sala.
Sobre el cierre de las puertas, Ramiro Hinojoza dijo: “creo que eso no se vale, esta es la casa del pueblo, esta es la casa que debe estar al servicio de toda la ciudadanía y sobre todo de la gente que le da de comer a México, que le da de comer a Zacatecas.
“No queremos llegar a un tema de la confrontación o la violencia, que entiendan la desesperación de la gente del campo, que está manifiesta en este tapiz de frijol que hoy está en parte de este Congreso.”
Más tarde, una comisión de tres legisladores integrantes de la Junta de Coordinación Política, salieron a escuchar a los campesinos: Jesús Padilla Estrada, de Morena; Alfredo Femat Bañuelos, del PT, y Pedro Martínez Flores, del PAN, quienes prometieron gestionar la rápida apertura de los centros de acopio.
Minutos después, el contingente de productores se dirigió al Palacio de Gobierno, en cuyo patio central interceptaron al gobernador David Monreal Ávila –que no se lo esperaba–, y lo encararon para hacerle el reclamo.
El mandatario prometió que dará la instrucción para la rápida apertura del acopio del frijol.