La avenida Antonio Valeriano, en la colonia Patrimonio Familiar, Azcapotzalco, amaneció ayer convertida en un río debido a una megafuga de agua potable en un tubo con diámetro de 12 pulgadas que, según el censo realizado por la alcaldía, anegó cinco viviendas y sorprendió a los vecinos con la fuerza del líquido que se filtró por las entradas y terminó levantando camas, volcando refrigeradores y arrastrando enseres.
María de la Luz Calderón, de la tercera edad, despertó porque su cama comenzó a moverse, “mi cama ya estaba nadando”, relató. Al encontrarse sola y atrapada pidió auxilio a una vecina que desde su predio respondió: “¡Yo también tengo agua!”. Su patio quedó completamente inundado y dentro de su domicilio “todo tirado y echado a perder”. Afortunadamente, sus mascotas –una perrita y una tortuga– fueron rescatadas.
Desde las 7:30 horas, miles de litros se desperdiciaron, desviándose en dirección norte y sur por las calles Olivo, Geranio, Yaquis y Zaachila. Para detener la filtración en sus casas, la familia de Cristian Hernández llenó costales con tierra del camellón y los acomodó frente a su zaguán. A cubetazos y con escobas en mano se movilizaron para sacar el líquido, que alcanzó cerca de 60 centímetros en el interior.
Dolores Pérez se percató temprano de que no había agua. “Mi hija salió, yo puse la manguera para llenar la lavadora, pero me asomé para ver cómo iba de agua y ya no había”, relató. Al abrir la puerta, ambas vieron que su pasillo “ya estaba inundado” y “en menos de 25 minutos se nos inundó adentro”. Eder y Rosalía, dueños de una tienda de abarrotes, refirieron que como vecinos fueron atendidos por dos representantes del seguro de la delegación, quienes evaluaron los daños y pérdidas.
Al sitio acudieron elementos de Protección Civil para apoyar en el desalojo del agua, mientras autoridades de la Secretaría del Agua intervinieron para detectar el origen de la fuga. Margarita Martínez González, directora de Obra por Administración y Sustentabilidad de la alcaldía, detalló que se realizaron cierres de válvulas que abastecen a las colonias El Arenal, La Raza, Ángel Zimbrón y Del Gas, pues al ser una vía primaria “era necesario contener el flujo y atender la emergencia”.
Según indicó, el servicio se restableció a las 9 de la noche, también apuntó que la tubería, compuesta por un ducto corrugado de polietileno reparado hace dos o tres años, requirió una excavación de 2.5 metros de profundidad, lo que dejó abierto un tramo de aproximadamente tres metros de diámetro.