Washington. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, revocó el viernes una norma sobre contaminación atmosférica del mandato del ex presidente Joe Biden que imponía límites más estrictos a las emisiones de las fundiciones de cobre.
La norma sobre el cobre, de mayo de 2024, obligaba a las fundiciones a limitar contaminantes como el plomo, el arsénico, el mercurio, el benceno y las dioxinas en virtud de las normas federales actualizadas sobre calidad del aire.
El anuncio de Trump otorga una exención de cumplimiento de dos años para las fuentes estacionarias afectadas, que la Casa Blanca dijo que ayudaría a promover la seguridad mineral estadunidense al reducir las cargas regulatorias sobre los productores nacionales de cobre.
“Imponer estos requisitos a una industria nacional tan limitada y ya bajo presión corre el riesgo de acelerar más cierres, debilitar la base industrial del país, socavar la independencia mineral y aumentar la dependencia de la capacidad de procesamiento controlada por el extranjero”, dijo la Casa Blanca al anunciar los cambios.
La norma hace referencia a las dos fundiciones de cobre de Estados Unidos, una de Freeport-McMoRan y la otra de Río Tinto. La medida se aplicaría a la fundición de Freeport y no estaba claro cómo afectaría a las instalaciones de Río Tinto.
Freeport, que tiene su sede en Phoenix, dio las gracias a Trump y dijo que la exención de dos años muestra la importancia del cobre para la seguridad nacional.
“Esta medida reconoce las realidades operativas que enfrenta la fundición de cobre nacional y proporciona el tiempo necesario para evaluar y planificar la reconsideración regulatoria apropiada de la Regla del Cobre y su futura implementación”, dijo un portavoz de Freeport.
Rio Tinto no respondió a una solicitud de comentarios.
Trump firmó un decreto a principios de este año que identificó el cobre como un material crítico para la defensa, la infraestructura y las tecnologías emergentes, incluida la energía limpia y los vehículos eléctricos.