Bruselas. La Unión Europea no está "a la altura de sus responsabilidades" frente a la guerra en Gaza, y su credibilidad en materia de política exterior "está desmoronándose", consideró el viernes el ministro belga de Relaciones Exteriores, Maxime Prévot, en una entrevista con AFP.
"Es indiscutible que, en este momento, la UE no está a la altura de sus responsabilidades en esta gigantesca crisis humanitaria, que roza lo inhumano", declaró Prévot.
"Es evidente que, para la opinión pública, la credibilidad de la política exterior que lleva a cabo la Unión Europea, especialmente en este asunto, está desmoronándose", agregó.
Este ministro centrista se refirió a las divisiones entre los 27 Estados miembros, incapaces desde hace meses de ponerse de acuerdo por unanimidad para sancionar a Israel por la devastadora guerra que libra desde hace casi dos años en la Franja de Gaza, en respuesta al ataque de Hamas el 7 de octubre de 2023 en territorio israelí.
El limitado acceso a la ayuda humanitaria para la población civil llevó a la ONU a declarar a finales de agosto el estado de hambruna en Gaza.
Ante esta situación, Bélgica decidió esta semana adoptar unilateralmente una serie de sanciones (económicas, consulares, etc.) contra Israel o algunos ministros del gobierno de Benjamin Netanyahu, y se comprometió a unirse a los países que reconocerán al Estado de Palestina al margen de la próxima Asamblea General de la ONU.
"Existe una obligación moral, pero también un imperativo legal de actuar; los países son parte de convenios y tratados internacionales que les obligan a hacer todo lo posible para evitar que se produzca un genocidio", insistió el viernes Prévot.
A finales de julio, Francia anunció que reconocería al Estado de Palestina en la Asamblea General de la ONU, que se celebrará del 9 al 23 de septiembre en Nueva York. Bélgica y otros países harán lo mismo.
Sin embargo, desde el punto de vista legal, el reconocimiento belga del Estado palestino, mediante un futuro decreto real, sigue estando sujeto a dos condiciones: la liberación de todos los rehenes en Gaza y la exclusión de Hamás de cualquier órgano de gobierno en los territorios palestinos.