Ciudad de México. En los últimos meses se ha dado una “tormenta perfecta” que ha provocado un fuerte aumento en los precios de la carne, ubicándolos en niveles sin precedentes, lo que afecta los bolsillos de los consumidores mexicanos, destacó la Asociación Mexicana de Productores de Carne (AMEG).
En un taller de medios, Juan Ley Zevada, vicepresidente de Comercio Exterior de la organización, destacó que este incremento poco o nada tiene que ver con la situación del gusano barrenador, sino con una serie de factores internos que se han ido agudizando.
“Los precios de la carne ahorita están yo creo que en precios históricos; sin embargo, tienen muy poco o nada que ver con la situación actual (gusano barrenador), Ahorita estamos como en una digamos tormenta perfecta”, indicó el también presidente de la Mexican Beef.
De acuerdo con datos del mercado, al cierre de junio pasado el kilogramo de carnes de res se ubicaba en 203.4 pesos, mientras que el año pasado se ubicaba en alrededor de 178.3 pesos por kilo, un alza anual de 14 por ciento.
Detrás de este incremento que tiene el precio de la carne de res a un nivel nunca antes visto, explicó Ley Zevada, está una prolongada sequía en los estados ganaderos, es decir, los del norte del país. Este fenómeno climático, explicó, no ha sido exclusivo de México, sino también de Estados Unidos y Canadá, lo que ha mermado la producción de la región.
“Entonces, tenemos que hay poca oferta no sólo en México sino en la región con el tema del ganado y la carne y por otro lado la misma sequía ha afectado la producción de los insumos que se necesitan para la producción de carne, es decir, los insumos agrícolas como grano, forrajes, etcétera”, explicó.
A lo anterior, añadió, hay que sumarle el hecho de que el consumo de carne ha ido en aumento en los últimos años, esto como consecuencia de que la gente cuenta con mayores ingresos, ya sea por los aumentos al salario mínimo o por los apoyos gubernamentales.