Torreón, Coah. El diputado local de Morena, Antonio Attolini Murra, principal critico del ayuntamiento de Torreón, a cargo del alcalde priísta, Román Alberto Cepeda González, denunció que la noche del sábado fue privado ilegalmente de la libertad, junto a su novia, por agentes de Tránsito y Vialidad de Torreón, quienes lo retuvieron durante más de dos horas en un corralón privado sin acta administrativa ni presencia de su defensa legal.

Dijo que alrededor de las 23:20 horas decidió abandonar un bar del centro de la ciudad, tras percatarse de que varias personas lo fotografiaban de manera insistente. Según dijo, algunas de ellas tendrían vínculos con funcionarios municipales. Apenas a unos metros de su domicilio, en la intersección del periférico Raúl López Sánchez y el bulevar Senderos, patrullas de Tránsito le bloquearon el paso y le ordenaron detenerse.

Los agentes le señalaron infracciones como no utilizar luces direccionales y conducir en estado de ebriedad. Attolini aseguró que sólo había consumido una cerveza y que el procedimiento fue irregular de principio a fin. “Pedí que me permitieran esperar a mi abogada, pero me lo negaron. Si fuera un operativo legal, no me habrían impedido ejercer mi defensa”, sostuvo en entrevista.

El diputado permaneció al interior de su vehículo mientras una grúa lo remolcaba, con su prometida a bordo, hacia el corralón Grúas Silva. Allí, denunció, continuó incomunicado hasta cerca de las tres de la mañana. “Esto fue un secuestro perpetrado con recursos públicos para intimidar y castigar mi labor crítica”, señaló.

Según su versión, la retención respondió a una consigna emanada de la alcaldía de Torreón. Mencionó por nombre al secretario del ayuntamiento, José Elías Ganem Guerrero; al director de Tránsito, Luis Morales; y al propio alcalde, Román Alberto Cepeda González, a quienes responsabilizó de ordenar un operativo “al servicio de sus rabietas personales”.

“El municipio es una caja de herramientas de la corrupción: las patrullas, los inspectores, los funcionarios se utilizan como mecanismos de acoso contra quienes no nos callamos”, acusó.

Attolini, crítico del alcalde y demás funcionarios públicos municipales, informó que solicitó medidas de protección ante la Secretaría de Gobernación, encabezada por Rosa Icela Rodríguez, y notificó los hechos a la dirigencia nacional de Morena.

La retención del legislador se produjo sin que mediara examen médico formal que acreditara el supuesto estado de ebriedad. “El único método que quisieron aplicar fue hacerme soplar en un tubo, sin personal calificado y sin cadena de custodia de la muestra. Un teatro”, expresó.

A su salida del corralón, dijo, no recibió ninguna constancia ni justificación oficial sobre el procedimiento. “Me soltaron como si nada, después de varias horas de hostigamiento”, relató.

El diputado anunció que interpondrá una denuncia penal por privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad y lo que resulte.

“Hoy fui yo; mañana puede ser cualquier ciudadano que incomode al poder”, advirtió.

El ayuntamiento de Torreón no fijó postura sobre la acusación.