Bonn. El jefe de la ONU Clima, Simon Stiell, pidió el jueves acelerar las negociaciones de aquí a la COP30 en la ciudad brasileña de Belém y destacó que tras dos semanas de reuniones preparatorias en Bonn que aún queda "mucho por hacer".
"No voy a adornar la realidad, aun queda mucho por hacer antes de encontrarnos en Belém", en la Amazonía, declaró Stiell al terminar la cita anual de la diplomacia del clima en la sede de la convención-marco de las Naciones Unidas sobre los cambios climáticos (CNUCC).
Al terminar las reuniones de trabajo, que cada año son cruciales antes de la COP, Stiell advirtió a los delegados: "Queda muchísimo por lograr para mantener el objetivo de 1,5 °C vivo, como lo exige la ciencia".
Esta declaración se da cuando este límite, que es el más ambicioso del Acuerdo de París, parece que pronto será alcanzado en el planeta, donde la temperatura está 1,3°C por encima de la era preindustrial.
"Debemos encontrar medios para tomar las decisiones difíciles con mayor rapidez" y "requerimos que los dirigentes y ministros se pongan a la obra", señaló.
Las negociaciones climáticas "avanzan muy lentamente", se lamentó el WWF en un comunicado, que subraya el retardo tomado a comienzos de las discusiones en Bonn sobre los temas de agenda.
"Los avances sobre temas claves como la transición para dejar las energías fósiles o el fin de la deforestación, no se materializaron", consideró Fernanda de Carvalho, una de las responsables de la ONG internacional.
Pero Ana Toni, directora general de la futura COP30, se mostró más positiva sobre el balance de las discusiones en Bonn.
"Estamos contentos por los avances que se lograron aquí", dijo en una entrevista a la AFP.