Ciudad de México. De entrar en vigor el Acuerdo Marco de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, Greenpeace aseguró este jueves que se crearían santuarios en zonas clave de los océanos, incluidos los mexicanos, para protegerlos de las actividades extractivistas, la contaminación y los efectos del cambio climático.
Durante una movilización para celebrar que el Senado ratificó el miércoles este tratado internacional para incluir a México, Ornela Garelli, campañista de océanos de la organización, explicó que el proteger estas zonas a través de esta iniciativa traería más beneficios más allá de sólo imponer límites, como a la industria o a la contaminación, ya que busca que los ecosistemas se recuperen.
Además, señaló que también permitirá el fortalecimiento de la resiliencia de estos ambientes naturales ante problemas como el cambio climático. Con esta iniciativa, resaltó que se espera cubrir 30 por ciento de los océanos para 2030, para cumplir el objetivo 30x30 de la Convención de Diversidad Biológica de la COP15 de 2022.
Si bien el Senado ya ratificó que México sea parte del acuerdo, la ambientalista aseguró que aún está pendiente la aprobación de la Presidencia y sea publicado en el Diario Oficial de la Federación para cumplir con todo el procedimiento ante la Organización de Naciones Unidas. Recordó que el acuerdo que fue adoptado y firmado por México en 2023, por lo que apenas van 50 de los 60 países requeridos como mínimo para ponerlo en marcha.
“Urge que el tratado empiece a entrar en vigor, que más países ratifiquen para que podamos pasar del papel del texto del tratado ahora sí a la práctica”, expresó afuera del recinto, mientras otros integrantes de Greenpeace tocaban batucadas y portaba carteles con las imágenes de especies marinas.
Reconoció que el mismo gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, ya ha anunciado los planes del gobierno para cumplir el objetivo 30x30, a conservar 30 por ciento del territorio nacional para 2030. Señaló que la meta se pueda cumplir, porque en la actualidad solo está protegido 22 por ciento de las aguas de México.