Presuntos sicarios atacaron con al menos un explosivo, arrojado desde un dron, la fachada de la alcaldía del municipio de Benito Juárez, en el oriente de Michoacán, zona en disputa entre los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y La Familia Michoacana (FM)

La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado confirmó que el ataque ocurrió alrededor de las 17:30 horas del lunes, aunque hasta el cierre de la edición no había reporte de heridos ni víctimas.

Grabaciones de cámaras de pobladores de Benito Juárez captaron la explosión que cimbró el centro de Bento Juárez, afectando con esquirlas la fachada del ayuntamiento, varios negocios y viviendas.

Agentes del Ejército, Guardia Nacional y Guardia Civil (Policía Estatal), desplegaron un operativo para tratar de ubicar a los criminales que operan los drones, conocidos en el argot criminal como “droneros”.

Según la Guardia Civil, este ataque forma parte de la “narcoguerra” que protagonizan principalmente tres cárteles de la droga en esa región y en municipios colindantes o cercanos con Guerrero y el Estado de México, como lo son Benito Juárez, Zitácuaro, Susupuato, Tuzantla, Tiquicheo y San Lucas.

Las organizaciones criminales en pugna en esta zona son el CJNG y FM, ésta última que al parecer contaría con el apoyo del Cártel de Los Correa, un grupo que opera principalmente en la sierra que abarca los municipios michoacanos de Hidalgo, Tzitzio, Queréndaro, Irimbo, Tuxpan y Jungapeo.

En esa zona de Michoacán, el CJNG es encabezado por William Edwin Rivera Padilla El Barbas, mientras que FM opera bajo las órdenes de los hermanos Johnny El Pez y José Alfredo El Fresa Hurtado Olascoaga, quienes concentran sus operaciones en las zonas limítrofes de Guerrero, Estado de México y Michoacán.