Oaxaca, Oax. Activistas dieron a conocer que 500 personas fueron detenidas este fin de semana durante el operativo Pescador, que el gobierno de Oaxaca realizó en inmediaciones de la central de abasto de esta capital. En la acción participaron cuerpos de seguridad estatales y federales.
La acción policial inició el viernes y concluyó ayer. Defensores de derechos humanos la consideraron un acto discriminatorio y violatorio, pues quienes fueron asegurados no cometieron ningún delito, o no tenían una orden de aprehensión, y los uniformados se basaron únicamente en su apariencia para arrestarlos.
En el operativo participaron mil elementos de la Fiscalía General del Estado, de las policías estatal, auxiliar, Bancaria, Industrial y Comercial, así como de la Guardia Nacional, entre otras corporaciones que ingresaron a la central de abasto para aprehender personas indiscriminadamente, sin mediar palabra, incluidos sujetos alcoholizados.
Los detenidos fueron subidos a patrullas y trasladados al área de la Fiscalía General Estatal de Oaxaca conocida como Los Pinos, sitio donde no hay donde resguardarse del calor.
De acuerdo con la fiscalía, se aseguraron “locales donde existe venta de droga; arresto de carteristas así como pobladores dedicados al robo” y extorsionadores que usaban el esquema “gota a gota”; igualmente se recuperaron espacios donde se vendían artículos robados, y otros donde estaban instaladas cámaras de videovigilancia no autorizadas; además se revisaron “establecimientos de venta de paqueterías, de casas de empeño”, y fueron clausurados “bares y cantinas clandestinas”.
Durante la acción sólo 13 personas fueron presentadas ante el Ministerio Público “por actividades de halconeo, fraude, drogas y diversos delitos”.
Isaac Torres Carmona, coordinador de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos en Oaxaca, apuntó que las autoridades efectuaron aprehensiones sin causa legal justificada, violaron el régimen constitucional de detenciones vigente en el país, retuvieron injustificadamente a los detenidos, a quienes incomunicaron y privaron de los derechos a la libertad y al libre tránsito, atentaron contra su integridad y la dignidad, por lo que los arrestados deben ser puestos en libertad de forma inmediata.
Asimismo, Filadelfo Aldaz Desiderio Activista social fundador y coordinador de la Comedora comunitaria “Nkä'äymyujkëmë”; puntualizó que estas acciones realizadas por el gobierno del gobernador morenista Salomón Jara Cruz son “racistas, clasistas y criminalizantes… estos operativos son una limpieza racial y étnica, en contra de personas que somos poblaciones de por sí vulneradas y vulnerables dentro de éste sistema colonial/racista y fascista”.
Denunció que el operativo Pescador, no tiene otra misión más que adecuar a Oaxaca con una visión empresarial cuyo objetivo es adecuar la situación para “el disfrute” de los turistas que visitan esta ciudad.
Incluso durante las acciones, los comerciantes y peatones recriminaron que los uniformados no actuarán contra carteristas o contra quienes se dedican a la venta de enervantes y solo lo hicieron en contra de “borrachitos” o personas en situación de calle.
La defensora, Yesica Sánchez Maya de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad consideró que este operativo además de ser violatorio de los derechos humanos, es sólo un plan para distraer la atención, pues hay situaciones prioritarias como la atención de inseguridad en las colonias, la violencia feminicida o algo tan básico como suministro de agua potable.
Indicó también, que derivado de estos hechos, la Defensoría de los Derechos Humanos de los Pueblos de Oaxaca tendría que haberse pronunciado e iniciado una carpeta de oficio pues estamos frente a acciones de discriminación, racistas y de etnofobia.