El Instituto de Fisiología Celular (IFC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) inauguró la Unidad de Edición Genética y Criopreservación, que responde a una necesidad estratégica en el desarrollo de la biomedicina y ciencias de la vida.
“Nos permitirá generar modelos animales modificados genéticamente de manera precisa y eficiente con métodos como CRISPR/Cas9”, también conocido como “tijeras moleculares”, destacó el director del instituto, Luis Bernardo Tovar y Romo.
Estimó que la puesta en marcha de esta unidad simboliza un paso firme hacia el futuro de la investigación biomédica en México, y representa la culminación de un esfuerzo colectivo a favor de la cooperación y el compromiso con la ciencia de excelencia.
Abundó que mediante la técnica de criopreservación, la cual permite preservar células, tejidos u órganos a muy bajas temperaturas, se garantiza la adecuada conservación de las líneas generadas, que son de gran valor.
“Contar con esta capacidad instalada nos coloca a la vanguardia de la investigación biomédica no solo a nivel nacional, sino también en el contexto internacional”, aseguró.
Tovar y Romo indicó que en la última década la tecnología CRISPR/Cas9 ha transformado profundamente la generación de los modelos animales para la investigación científica. Antes, modificar el genoma de un organismo para estudiar enfermedades y funciones biológicas era un proceso lento, costoso y técnicamente limitado.
“Hoy, gracias a esta innovación podemos introducir nuestras líneas específicas en el genoma de ratones y otras especies como peces y cerdos de manera rápida, eficiente y con una precisión sin precedentes”, resaltó.
María Soledad Funes Argüello, coordinadora de la Investigación Científica de la UNAM, expuso que la nueva unidad culmina el esfuerzo de muchos años, “le da al IFC una fortaleza única y una perspectiva experimental que no se tiene de manera general en la Universidad”.