La senadora Cynthia López Castro anunció ayer que deja su militancia de 21 años en el PRI y sale de la bancada del partido por diferencias con la dirigencia, ello en medio de la controversia surgida a partir de la madrugada del viernes en que abandonó el salón de plenos para no votar la reforma que impide interponer amparos y cualquier otro recurso jurídico contra reformas constitucionales.

No quiso precisar si se incorporará a Morena, dijo que por lo pronto se mantendrá como legisladora sin partido, insistió en que no votó porque se sintió mal de salud y rechazó que antes lo hubiera consultado con el coordinador de Morena, Adán Augusto López Hernández. Se quejó también de ser objeto de una campaña de linchamiento político en redes sociales desde el pasado viernes.

Más tarde, el senador y dirigente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, reveló que López Castro fue expulsada desde el momento mismo en que, sin justificación alguna, abandonó el salón de sesiones y no votó en contra, como era el acuerdo del grupo priísta. Por estatutos, agregó, ese hecho amerita la separación.

Alito hizo notar que López Castro tenía derecho de audiencia, pero no se presentó a la reunión de la bancada priísta, ya que antes públicamente anunció la separación del PRI, así que queda expulsada del partido y del grupo priísta. Puso en duda que se hubiera ido por motivos de salud. Subió a tribuna a posicionarse contra la reforma y luego se fue, expuso y puso de ejemplo al senador Miguel Riquelme, quien se presentó a otra votación clave después de una operación delicadísima.

Por su parte, la senadora López Castro insistió en que le subió la presión, se sentía mal y por ello se retiró y ya no votó, pero dijo estar contra esa reforma.

Insistió en que deja las filas del PRI porque ya no comulga con ese partido, ni se siente a gusto. De todas formas, manifestó, seguirá representando los derechos de sus votantes.