Madrid. El Presidente de Argentina, Javier Milei, volverá a Madrid el próximo viernes, un mes después de su primer viaje a España como mandatario y que derivó en una grave crisis diplomática entre ambos países con un cruce de insultos y acusaciones. De ahí que desde el gobierno español, presidido por el socialista Pedro Sánchez, se exigió “respeto hacia el pueblo de España y hacia sus instituciones”, en una vuelta a la tensión política entre ambas administraciones que hace sólo unas semanas estuvieron al borde la ruptura de relaciones.

Milei viajó por primera vez a España como Presidente de su país el pasado 17 de mayo, con tres actos principales en su agenda: presentar su libro bajo el amparo de la editorial Planeta, mantener una reunión con los empresarios de las multinacionales más importantes de España y, sobre todo, participar en el foro de ultraderechistas organizado por Vox, Viva24, en el que se congregaron líderes de la extrema derecha europeo y latinoamericana.

Antes de su llegada a España, Milei había sido acusado de “consumar sustancias” por parte del ministro de Transportes de España, Óscar Puente, y la respuesta de Milei fue llamar “corrupta” a la esposa del presidente Sánchez, Begoña Gómez, por las investigaciones abiertas en su contra por tráfico de influencias y corrupción. Las graves palabras de Milei desataron el malestar del Ejecutivo ibérico, que primero pidió una rectificación pública, que nunca se produjo, y después ordenó la retirada de su embajadora en Argentina, que se mantiene hasta la fecha.

En este contexto, Milei volverá este viernes a Madrid para recibir un premio por parte de la fundación ultraliberal Juan de Mariana y, como en su viaje anterior, tampoco tiene previsto reunirse con nadie del gobierno español ni de la Casa Real. De ahí que la vocera del Ejecutivo, Pilar Alegría, decidió advertirle: “Desconocemos la agenda del presidente de Argentina, pero si finalmente el viaje se produce, espero que durante sus declaraciones mantenga respeto hacia el pueblo de España y hacia sus instituciones”.

Milei llegará a España después de una breve gira por Europa, en la que participó como invitado a la reunión de líderes del G7 en Italia, invitado por su aliada ideológico Giorgia Meloni, y tras haber participado en la Cumbre Global por la Paz en Ucrania celebrada en Suiza, donde coincidió con el presidente español pero que sin que trascendiera ningún tipo de contacto entre ambos.

Sobre el viaje de Milei a España se pronunció desde Buenos Aires su vocero, Manuel Adorni, quien explicó que “en principio no” se verá con ningún miembro del Gobierno, aunque matizço que “la agenda puede cambiar hasta el jueves”. El representante del gobierno argentino situó la polémica entre ambos gobiernos como “una discusión entre dos personas a título personal, es ya un tema saldado”.

Desde Alemania, el vocero del gobierno, Steffen Hebestreit, calificó de “falta de gusto” las palabras vertidos por Milei contra la esposa de Sánchez, al explicar que “este Gobierno no puede estar diciendo lo que segundas partes dicen de terceros. De vez en cuando sí, pero en este caso no, porque fue tan claro y falta de gusto que no hace falta decir nada”.