Washington. El presidente Joe Biden dijo el jueves que Rusia ha llevado adelante un ataque no provocado a Ucrania y que, en gran medida, está sucediendo lo que Estados Unidos predijo.
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Estados Unidos defenderá "cada ápice del territorio de la OTAN", pero no enviará tropas a Ucrania, anunció este jueves el presidente estadounidense..
"Nuestras fuerzas armadas no van a Europa para combatir en Ucrania, sino para defender a nuestros aliados de la OTAN y tranquilizar a estos aliados del Este", afirmó Joe Biden en un discurso televisado desde la Casa Blanca.
Asimismo, anunció sanciones económicas y restricciones de exportación a Rusia en respuesta a la invasión, así como a otros cuatro bancos rusos y suprimirá más de la mitad de las importaciones tecnológicas de Rusia, afirmó.
"Esto impondrá un costo alto a la economía rusa, tanto de inmediato como a largo plazo", advirtió.
Las sanciones financieras van impuestas contra cinco entidades bancarias de Rusia, así como a "las élites" del país, entre las que se encuentran las familias del exministro de Defensa Sergei Ivanov, o el antiguo viceprimer ministro, Igor Sechin, así como otras personalidades de Rusia como la del político Nikolai Patrushev o los directivos banqueros Andrey Puchkov, Yuriy Solviev, y Alexander Vedyakhin.
En un comunicado la Casa Blanca detalla que las sanciones se extienden al banco Sberbank y a 25 subsidiarias --al que se le restringen las transacciones realizadas en dólares--, a VTB y a 20 subsidiarias --al que se le congelan los activos vinculados al sistema financiero de Estados Unidos--, y otras tres entidades como Bank Otkritie, Sovcombank OJSC y Novikombank --que recibirán la misma sanción que VTB--.
Canadá y Reino Unido anuncian sanciones contra Rusia
Por su parte, Canadá anunció el jueves más sanciones contra Rusia, dirigidas a 62 personas y entidades, incluidos miembros de la élite y los principales bancos rusos, y cancelando todos los permisos de exportación, luego de que Moscú lanzara una invasión total de Ucrania.
"Hoy, a la luz del imprudente y peligroso ataque militar de Rusia, estamos imponiendo nuevas y severas sanciones", dijo el primer ministro Justin Trudeau en una conferencia de prensa.
En tanto, Reino Unido cerró su espacio aéreo a la aerolínea rusa Aeroflot, congeló haberes de grupos bancarios y de fabricantes de armas y sancionó a otros cinco magnates rusos, en represalia, anunció el jueves el primer ministro Boris Johnson.
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Al anunciar las sanciones ante el Parlamento británico, Johnson afirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, "nunca podrá lavar sus manos de la sangre de Ucrania".
Aeroflot, miembro de la alianza internacional SkyTeam con Air France-KLM, ya no podrá volar al Reino Unido.
Además de los cinco bancos ya sancionados el martes, el gigante bancario estatal ruso VTB está en el punto de mira y vio sus activos en suelo británico congelados.
En términos más generales, las nuevas medidas "nos permitirán excluir por completo a los bancos rusos del sector financiero británico, que es por supuesto el mayor de Europa", dijo Johnson.
Las medidas también impedirán a las empresas públicas y privadas recaudar fondos en el Reino Unido y limitarán la cantidad de dinero que los rusos pueden tener en sus cuentas bancarias británicas.
En total, 100 nuevas entidades están en el punto de mira, como el conglomerado Rostec (defensa, aeroespacial, tecnologías...).
Cinco empresarios fueron añadidos a la lista de personas que tienen prohibida la entrada al Reino Unido, donde sus activos están congelados.
Entre ellos figuran Kirill Shamalov (petroquímica), el antiguo yerno de Vladimir Putin según los medios de comunicación, Yuri Sliousar (aeronáutica), Pyotr Fradkov (banca), Denis Bortnikov (banca) y Elena Georgieva (banca).
Además, se introducirá una nueva ley que apuntará las exportaciones de tecnología a Rusia, lo que "reducirá las capacidades militares, industriales y tecnológicas de Rusia en los próximos años", dijo Johnson.
Johnson condenó duramente la invasión rusa de Ucrania, pero su gobierno ha recibido críticas por su pasividad ante el flujo de dinero ruso de origen dudoso que en entró en Londres en los últimos años.
