Ciudad de México. Al punto del medio día de este martes arrancarán las votaciones en los que 6 mil 494 trabajadores de la planta General Motors (GM) en Silao, Guanajuato, decidirán si avalan o no el contrato colectivo (CCT) vigente, cuya titularidad pertenece al sindicato “Miguel Trujillo López”, de la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
La consulta es parte de la reposición del proceso de legitimación del CCT y será de las más vigiladas por autoridades laborales nacionales e internacionales, a fin de evitar irregularidades como las que acreditó la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en un primer ejercicio realizado en abril pasado.
Las nuevas votaciones que iniciarán hoy “de manera ininterrumpida” a partir de las 12 horas y concluirán mañana a las 22 horas, también forman parte del “plan de reparación”, conformado por 20 compromisos que acordaron los gobiernos de México y Estados Unidos el pasado 8 de julio, tras la queja que presentó la Casa Blanca que invocó el capítulo laboral del Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por la “denegación” de derechos de los trabajadores de la planta relativos a la libertad sindical.
Este hecho significó la activación, por primera vez de manera oficial, del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida, y representó el primer curso de remediación.
Sindicato de GM en América Latina exige libertad sindical
Sobre el particular, la Red de Trabajadores de General Motors en América Latina, afiliados a Industrial Global Unión, exigieron que se respete la libertad sindical durante la nueva votación en las instalaciones de la armadora.
En una carta dirigida al presidente de GM, Mark Reuss, le solicitan trabajar “de manera proactiva” con las autoridades mexicanas y estadunidenses “para lograr una votación secreta, justa, transparente y sin obstáculos, y que se respete la decisión de los trabajadores”.
La Red de trabajadores de General Motors en Argentina, Brasil, Colombia y México también denunció que el sindicato “Miguel Trujillo López” intenta actualmente “presionar para que los trabajadores voten afirmativamente para mantener el actual CCT de protección patronal.
Indicó que “les promete rifas, dinero en efectivo, prometiendo dadivas y amenazando con que GM se va a ir en caso de que voten por el “no” y que perderán los beneficios que tienen”.
"Todo listo", señala la STPS
Este martes, la Secretaría del Trabajo aseguró que está “todo listo” para realizar el nuevo proceso de legitimación del CCT de la planta GM, en Guanajuato. El ejercicio se realizará “de manera personal, libre, directa y secreta”, como lo establece la reforma laboral de 2019.
Indicó que hasta este martes más de 40 personas de diversas áreas de esta dependencia supervisarán el desarrollo de la jornada de votación. Además, como informó La Jornada el pasado 15 de julio, hay presencia de decenas de trabajadores del Instituto Nacional Electoral (INE) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), invitados por el gobierno de México “como únicos autorizados para realizar la labor de observación”.
Detalló que los lugares asignados para la votación están ubicados en “espacios apartados de las oficinas del Sindicato y las oficinas administrativas. Y afirmó que sólo se permitirá sufragar a aquellos trabajadores que se encuentren listados en el padrón utilizado en la consulta de abril pasado”.
La dependencia recordó que para “garantizar el derecho de los 6 mil 494 trabajadores de emitir su sufragio de manera libre e informada”, desde el 9 de julio envió inspectores que realizaron entrevistas aleatorias a los empleados para “verificar que el ambiente esté libre de coerción e intimidación”. Además, se distribuyeron 7 mil folletos informativos señalando los derechos de los trabajadores e informando las consecuencias de votar por el sí o por el no.
La STPS puntualizó que si la mayoría de los trabajadores vota a favor del contrato colectivo, éste mantendrá su vigencia y el sindicato titular, afiliado a la CTM, lo seguirá representando en futuras revisiones. Si la mayoría rechaza el contrato, éste se dará por terminado, pero “los trabajadores no perderán ningún derecho adquirido y conservarán las mismas prestaciones y condiciones laborales”.