Ciudad de México. Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) participó en la conferencia de prensa de “ventas vehículos ligeros, pesados y autopartes, mayo 2020” junto con la AMDA, AMIA e INA y destacó la importancia de impulsar el mercado interno para apoyar a transportistas a través de mantener baja la importación de vehículos usados.
Elizalde Lizárraga explicó que al país sólo hay dos maneras de que entren vehículos, ya sean nuevos o fabricados en México y los importados usados, que tienen una edad promedio de 16 años de antigüedad, generalmente provienen de Estados Unidos.
Señaló que durante los primeros tres meses del 2020 hubo un incremento considerable de la importación de vehículos usados a causa de la pandemia, del tipo de cambio, la caída en abril y mayo del 32.7%, es decir, se importan en la mayoría de los casos unidades con más de 16 años de uso que nos son competitivos, que consumen más combustibles y que contaminan más, de acuerdo con el experto.
En cuanto a la importación de los vehículos de carga, arroja que en el primer trimestre ha incrementado de una manera considerable, alrededor de 600 a 650 unidades, si bien una caída fuerte en abril y en mayo, pero aún así se están importando 384 tractocamiones, a lo que el presidente de la Asociación denominó como relevante para la situación actual.
“Lo ideal es que se mantenga la importación de pesados usados chatarra a niveles mínimos. Es importante mantener baja la importación de usados con control estricto, muchos de los vehículos importados son a través de fraude fiscal, es decir que no cumplen con los requisitos y hay que revisar bien. Estamos a favor del libre comercio, pero no a que se importen unidades chatarra”, dijo el empresario.
Agregó que se debe impulsar el mercado interno para generar empleos en México y así apoyar a los transportistas, además de invertir en el transporte público ya que es invertir directamente en los ciudadanos, pues el 41% de las personas viaja en autobús para trasladarse a sus empleos.
Destacó que es fundamental impulsar el mercado interno porque los transportistas viven un contexto de constante robo al autotransporte; cambios tecnológicos; flota antigua; tipo de cambio que ha aumentado e impacto a las Mipymes, además del contexto de la pandemia. En pocas palabras, el autotransporte está en la línea de fuego y es clave para construir la nueva normalidad.
“Necesitamos apoyar a nuestros héroes, que están a punto de entrar a un proceso complejo donde van a requerir ser más competitivos y es donde se les puede apoyar, con un vehículo más nuevo que le va a ayudar a reducir más costos de operación y a impactar en la cadena de movilidad y logística”, finalizó Elizalde.
