La mandataria recibió en Palacio Nacional al equipo de clavadistas mexicanos que obtuvieron medallas en el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos en Singapur.
El clavadista fue de menos a más en la competencia y con una puntuación de 511.95 unidades subió al podio junto con Cassiel Rousseau de Australia (534.80) y Oleksil Sereda de Ucrania (515.20); oro y plata respectivamente.
El mexicano acarició la perfección con una actuación extraordinaria que rompió la hegemonía china en el deporte de clavados. Un cuádruple y medio adelante le valió una nota de 102.60 puntos, la más alta de toda la final.
El nadador francés completó la prueba en 1 minuto y 52.61 segundos, superando la marca de 1 minuto y 54 segundos impuesta por el estadunidense Ryan Lochte en 2011.
El representativo fue comandado por Osmar Olvera, quien logró su quinta presea y se consolida como el líder de la generación más laureada en la historia de la disciplina.
Las representantes españolas se colgaron la medalla de oro con 282.6087 puntos; el podio fue completado por Italia y las ondinas rusas, que compiten bajo bandera neural.
Los organizadores agradecieron el respaldo recibido tanto de padres de familia, organizaciones civiles, autoridades locales y del gobierno del estado de México, a través de la Secretaría de Educación.
Firmó una declaración conjunta con el gran imán Nasaruddin Umar en la que expresaron su preocupación por la “deshumanización” y la “instrumentalización” de la religión en situaciones de violencia.