La noche de este sábado, el recinto recibió a varios artistas que ofrecieron una fusión de música clásica, sonidos étnicos, jazz y blues dejando atrás la pesadilla del viernes.
Elementos del Ejército y la policía capitalina rodearon el recinto y aseguraron que el desalojo se debía a la falta de uno de los permisos para llevar a cabo el concierto del músico vasco Fermín Muguruza.