“Que en este lugar se simbolice una llama eterna, como el amor eterno de Miguel por Colombia”, aseguró Uribe Vélez desde una pequeña tarima junto a una fotografía del precandidado asesinado.
Uribe, máxima figura de la derecha colombiana, fue condenado la semana pasada en un tribunal de primera instancia por intentar sobornar a paramilitares para que lo desvincularan de estos violentos escuadrones antiguerrillas.
La condena es la más reciente decisión en un largo proceso profundamente polarizado de casi 13 años, en el que los partidarios del político alegan una persecución y sus detractores piden justicia.
"Todas las pruebas reunidas permiten concluir que el testigo no está faltando a la verdad", indicó la jueza, que también dió por buenas las declaraciones de Monsalve durante la lectura del fallo al estar avaladas por pruebas documentales.
La Fiscalía de Colombia no encontró pruebas que le impliquen en la financiación del 'Bloque Suroeste' de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), en el departamento de Antioquia, en el noroeste del país.
Se le investiga por un supuesto fraude y soborno de testigos, en un proceso en el que es acusado de vínculos con escuadrones paramilitares de ultraderecha.