Cuernavaca, Mor. Un grupo de jubilados y pensionados del gobierno del estado se plantó en la parte trasera del palacio estatal para exigir a la gobernadora Margarita González Saravia y al Congreso local que le pague siquiera “el mínimo vital”, es decir, 8 mil 364 pesos o los 40 salarios mínimo que establece la ley del servicio civil, aseguró Juan Juárez Rivas, abogado de los manifestantes.
Los inconformes se colocaron en sillas en la banqueta, a un lado de la puerta posterior del palacio estatal, con sus respectivas cartulinas y exigencias.
“Son gente jubilada y pensionada del poder ejecutivo que tiene cinco, 10, 15 años que el Congreso los jubiló y, desafortunadamente, los diputados no les han garantizado el mínimo vital, es decir, 8 mil 364 pesos o los 40 salarios mínimos que establece la ley del servicio civil.
“Se ha buscado a los diputados para que reflexionen, para que actualicen sus decretos, para que hagan cumplir la ley, pero dicen que ellos no tienen por qué hacer cumplir la ley a otro poder; recurrimos al secretario de Administración y Finanzas, Jorge Acosta, para que tenga una reunión con nosotros pero se negó, entonces lo único que nos dejan es la calle para venir a reclamar que se respete el mínimo constitucional”, aseguró el abogado.
Las personas que protestaron son personas mayores de 60, 70 y 80 años de edad que padecen, por su edad, varias enfermedades, indican.
“Señora gobernadora: el artículo 123 de la Constitución fija un salario mínimo digno. Hoy jubilados y pensionados que ganamos menos de 8 mil 364 pesos mensuales”, decía una de las cartulinas de los jubilados y pensionados que se manifestaron esta mañana detrás del palacio de gobierno del estado.
Por su condición de las personas, que son mayores y están enfermos, aseguraron que sólo acudieron a manifestarse unos 30, pero que son miles de trabajadores del gobierno del estado que han sido pensionados o jubilados con mil 500 pesos, 2 mil, 3 mil y 4 mil pesos al mes. Lo cual es insuficiente hasta para comprar sus medicinas.
Juárez Rivas cuestionó que la gobernadora, los diputados y los magistrados tengan salarios estratosféricos, comparados con los salarios de los trabajadores y peor aún con los jubilados y pensionados de estos tres poderes del estado de Morelos.