Homún, Yuc. Un total de 90 tortugas terrestres y dulceacuícolas fueron reintegradas –translocación, en términos científicos- a la Reserva Parque Estatal Lagunas de Yalahau, en esta comunidad maya, con el objetivo de fortalecer la conservación de la vida silvestre en Yucatán, informó la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS).
A diferencia de una simple reubicación, la translocación implica trasladar organismos vivos a un sitio distinto e incluso más alejado de su distribución original, con el propósito de fortalecer poblaciones silvestres, restituir individuos en ecosistemas saludables o conservar especies en riesgo.
Bajo esta perspectiva, la acción realizada en Lagunas de Yalahau representa una intervención de conservación activa, alineada con las directrices de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), y las mejores prácticas en manejo de vida silvestre.
Los ejemplares trasladados corresponden a 20 tortugas de Guadalupe o jicoteas (Trachemys venusta) y 70 mojinas (Rhinoclemmys areolata), todas previamente resguardadas y atendidas tras ser entregadas mediante reportes ciudadanos o denuncias por tenencia inadecuada, precisó la SDS.
Ambas son especies nativas de la Península de Yucatán: la tortuga de Guadalupe, conocida en maya como kaa nish, es dulceacuícola y habita ríos, lagos y cenotes; mientras que la tortuga mojina de monte, llamada chacpol, es terrestre y ocupa sabanas, selvas y pastizales.
Estas tortugas desempeñan funciones ecológicas esenciales, como la dispersión de semillas y el control de poblaciones acuáticas y terrestres, además de presentar ciclos reproductivos asociados a la temporada de lluvias.
Sin embargo, mientras Trachemys venusta cuenta con una amplia distribución en Mesoamérica y subespecies propias de la región, Rhinoclemmys areolata está catalogada como especie amenazada por la UICN y por la NOM-059, lo que vuelve prioritaria su protección y refuerza la relevancia de este tipo de acciones de conservación.
La Reserva Parque Estatal Lagunas de Yalahau, con su cuerpo de agua, vegetación nativa y condiciones de refugio, representa un espacio idóneo para el restablecimiento de estas especies clave y para asegurar la continuidad de los procesos ecológicos que sostienen la biodiversidad local.
La directora de Gestión y Conservación de Recursos Naturales de la SDS, Elsy María Sáenz Pérez, destacó la prioridad de evitar la tenencia ilegal de fauna silvestre y recordó que estos animales –tortugas- no deben mantenerse en los hogares. “Su hogar es el ecosistema. Invitamos a la población a reportar casos de tenencia o ejemplares en riesgo”, agregó.
Este proceso de translocación -reintegrar ejemplares en ecosistemas saludables y seguros-, se efectuó en colaboración con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el Centro de Conservación de la Vida Silvestre “Animaya” del ayuntamiento de Mérida y el ayuntamiento de Homún, como parte de los esfuerzos conjuntos para proteger especies nativas y sus hábitats.