Washington. La confianza de los consumidores en Estados Unidos se desplomó en noviembre y anotó su nivel más bajo desde junio de 2022.
La Encuesta de Consumidores de la Universidad de Michigan –una de las principales encuestas de opinión de los consumidores– mostró que el índice de confianza cayó a 50.3 puntos en noviembre, una disminución de 6.2 por ciento respecto al mes anterior y de casi 30 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado.
“La disminución de la confianza de este mes fue generalizada en toda la población, observada en todas las edades, ingresos y afiliación política”, explicó la encuesta.
La directora de la encuesta, Joanne Hsu, atribuyó esta caída sobre todo al cierre parcial del gobierno federal, por falta de acuerdo sobre el presupuesto entre republicanos y demócratas en el Congreso. “Los consumidores están preocupados por las posibles repercusiones negativas para la economía”, afirmó en un comunicado.
El cierre de la Administración, ahora en su segundo mes, ha dado lugar a recortes en los beneficios, incluyendo cupones de alimentos, para millones de hogares de bajos ingresos. Cientos de miles de trabajadores federales han sido suspendidos de empleo y sueldo y otros están trabajando sin sueldo, mientras que los viajeros se enfrentan a retrasos en los aeropuertos, ya que se recortan los vuelos.
No se había registrado un nivel tan bajo en más de tres años, ni siquiera en abril, cuando el anuncio de los aranceles comerciales del presidente Donald Trump provocó gran conmoción entre los consumidores y los mercados financieros.
Las expectativas de inflación de los consumidores para el próximo año aumentaron de 4.6 por ciento de octubre a 4.7 este mes. Las expectativas de inflación para los próximos cinco años se redujeron a 3.6 por ciento desde 3.9 por ciento el mes pasado.
Por otro lado, un informe de la Reserva Federal (Fed) de Nueva York mostró que los estadounidenses declararon el mes pasado que esperaban una moderación de las presiones inflacionistas a corto plazo, mientras seguían preocupados por las perspectivas del mercado laboral y sus finanzas personales.
La encuesta de la Reserva Federal de Nueva York se realizó a lo largo del mes de octubre, en medio del cierre del Gobierno y de los crecientes temores sobre las perspectivas del mercado laboral.