Ciudad de México. La presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció que “difícilmente” se hubiera podido informar con anticipación de la magnitud de las lluvias registradas en días recientes y que, hasta ahora han dejado 64 personas fallecidas y 65 desaparecidas.
Esto, señaló en la mañanera de este lunes, debido a que el gobierno federal no contaba con indicios científicos o meteorológicos que anticiparan la dimensión de las trombas que azotaron cinco estados y han dejado a decenas de comunidades aisladas.
“En esta zona del país se alertó que iba a haber lluvias fuertes, pero fueron varios fenómenos los que se presentaron que generaron esta lluvia intensa que no se esperaba que fuera de esta magnitud. No había ninguna condición científica o meteorológica que pudiera indicarnos que iba a tener esta intensidad”, aseveró la mandataria.
Dijo que la Comisión Nacional del Agua (Conagua), tiene un sistema que informa a Protección Civil de los estados y los municipios.
Sin embargo, los eventos de la semana pasada que afectaron a cinco entidades, se desarrollaron de manera súbita, por lo que a diferencia de un huracán o ciclón, no pudo advertirse.
Y es que, explicó que cuando se generan los huracanes y los ciclones, su formación y trayectoria puede ser monitoreada con varios días de anticipación; pero lo que sucedió la semana pasada fue intempestivo y no se pudo definir la dimensión.
“Se hicieron alertamientos un día antes en distintos municipios, pero difícilmente se podía haber tenido conocimiento con mucho tiempo de anticipación, diferente a como ocurre con los ciclones o los huracanes”.
Tras los impactos de estas lluvias, la jefa del Ejecutivo señaló que se reforzarán los sistemas de monitoreo y alerta temprana.
“Es muy importante que frente a esta situación tengamos como gobierno todas las herramientas científicas necesarias para poder garantizar el alertamiento previo ahí en donde es posible”, puntualizó.
Anunció la conformación de dos grupos de investigación científica, uno para el Pacífico y otro para el Atlántico, con el fin de fortalecer la capacidad de predicción y respuesta ante fenómenos meteorológicos extremos.
Por su parte, el titular de la Secretaría de Marina, almirante, Raymundo Morales, indicó que las lluvias que impactaron la zona oriente del país se originaron por la coincidencia de varios sistemas meteorológicos que confluyeron entre el 7 y 9 de octubre.
“Ya estamos en la parte final de la época de lluvias, los ríos están a un nivel máximo de capacidad y los mantos freáticos están bastante cargados, además los cerros están debilitados porque tenemos mucha lluvia que ha caído todo el año. Las grandes cantidades de lluvia provocaron el incremento de los niveles de los ríos y las inundaciones por consecuencias”, dijo.
Agregó que el 8 de octubre se identificó “una situación muy compleja”. Por un lado, en el Pacífico estaba la tormenta tropical Priscilla, al suroeste de Los Cabos, y otra tormenta, Octavio, cerca del Golfo de Tehuantepec; en tanto que en el Atlántico, una baja presión que después se convirtió en el huracán Raymond, y otra baja frente a Veracruz.
Detalló que a esos fenómenos se sumó un frente frío que descendía desde Texas, el cual se taponó con un frente cálido y generó una línea de vaguada que recorrió el centro y oriente del país.
“Eso provocó una gran cantidad de actividad atmosférica. Los ríos estaban ya en su nivel máximo de capacidad y los suelos saturados de humedad, lo que derivó en desbordamientos e inundaciones”, apuntó el secretario.
Acentuó que si bien el contexto meteorológico era identificable, no era posible prever con exactitud la intensidad de la precipitación. “Identificar exactamente cuánta lluvia va a caer no es tan sencillo”.
“Tenemos dos grupos de trabajo de investigación, uno en el Pacífico y otro en el Atlántico, coordinados por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Secretaría de Marina”, informó.
Sheinbaum explicó que estos equipos se encargarán de desarrollar nuevas herramientas de monitoreo y de instalar boyas en el Pacífico para la detección temprana de alteraciones meteorológicas. “Nuestro objetivo es generar todas las condiciones de alertamiento necesarias frente a fenómenos meteorológicos”, agregó.