Mérida, Yuc. El gobernador Joaquín Díaz Mena acudió hoy en la mañana al Servicio Médico Forense de la Fiscalía General del Estado (Semefo), donde atendió personalmente a familiares de las personas fallecidas en el accidente de la carretera Mérida–Campeche.

Externó la solidaridad del pueblo de Yucatán por esta tragedia, y garantizó el respaldo y facilidades necesarias para el reconocimiento y traslado de las víctimas hasta sus comunidades.

Y es que los 15 albañiles muertos en la tragedia vehicular, en el tramo Mérida-Campeche, el sábado, eran nativos de Calkiní y de otras poblaciones de la entidad vecina de Yucatán. Al momento del accidente, partían de este Estado rumbo a Campeche después de terminar su jornada laboral.

Durante la visita al Semefo, el mandatario enlazó vía telefónica, a través de altavoz, a la gobernadora de Campeche, Layda Sansores San Román, quien transmitió sus condolencias y ofreció el apoyo total de su gobierno a los deudos.

El secretario General de Gobierno, Omar Pérez Avilés, junto con su homóloga de Campeche, Liz Hernández Romero, y el Fiscal General de Yucatán, Juan Manuel León, estarán en coordinación con las familias para desahogar las diligencias necesarias y asegurar que reciban acompañamiento institucional en cada paso del proceso.

De igual forma, autoridades de la alcaldía de Calkiní, Campeche, se sumó a este esfuerzo conjunto facilitando transporte y apoyo logístico para los familiares de las víctimas.

Las autoridades estatales y municipales reiteraron que mantendrán un canal directo de comunicación con los deudos para garantizar respaldo permanente.

El sábado pasado, se registró un saldo de 15 personas muertas al ocurrir un accidente carretero en la vía Mérida-Campeche, al colisionar una Van de pasajeros, un tráiler y un automóvil particular.

El trágico percance ocurrió en la zona del municipio de Kopomá, al sur-sureste del Estado de Yucatán.

Según el parte preliminar de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la Van trasladaba a unos 15 albañiles cuando se estrelló contra un tráiler, propiedad de una empresa cervecera.

El impacto derivó en el fallecimiento inmediato de los 15 albañiles de la unidad de transporte público.

Al momento del percance, los alarifes se trasladaban a Campeche, de donde eran nativos, después de una jornada laboral en Yucatán.