Ciudad de México. En vísperas del 40 aniversario de los sismos ocurridos el 19 de septiembre de 1985, la Cruz Roja Mexicana y la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México firmaron un convenio de colaboración para fortalecer acciones de prevención y capacitación del personal.
El documento, signado hoy, tiene como objetivo fortalecer a ambas instituciones en materia de capacitación, prevención y gestión integral del riesgo, promoviendo la formación de más personas con los conocimientos, habilidades y destrezas necesarias para salvar vidas en situaciones de emergencia.
Asimismo, contempla la evaluación de los conocimientos adquiridos y la certificación de competencias laborales y digitales bajo estándares reconocidos a nivel nacional e internacional.
Jorge Antonio Ortiz Torres, asesor de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México dijo que el convenio representa un “ejemplo tangible de los lazos de cooperación, entendimiento mutuo y voluntad conjunta para fortalecer las capacidades de la Ciudad de México.”
Añadió que el proyecto respondió a la necesidad compartida por enfrentar los desafíos en materia de prevención y respuesta a emergencias en el contexto del acelerado crecimiento urbano de la capital del país y las diversas causas de accidentes y desastres que se presentan.
Destacó que pacto no es solo un marco administrativo y jurídico, sino también un reflejo del compromiso compartido de ambas instituciones con la población y acotó que gracias al acuerdo podrán intercambiar criterios e investigaciones y estudios, así como fortalecer los procesos de certificación y competencias laborales para que las personas respondientes cuenten con las mejore credenciales y capacidades para atender emergencias.
El acuerdo también refuerza la labor del Centro Nacional de Capacitación y Adiestramiento (CENCAD), espacio que posiciona a la Cruz Roja Mexicana como referente nacional en reanimación cardiopulmonar, evacuación de inmuebles, combate de incendios y rescate, incluyendo situaciones de desastres mediante simuladores especializados. Allí la institución forma a instructores, se capacitan brigadistas y se prepara a la ciudadanía para actuar ante cualquier emergencia.
Carlos Freaner Figueroa, presidente de la Cruz Roja Mexicana dijo que la colaboración entre ambas instancias en una urbe como la Ciudad de México es “básica” porque está asentada en un sitio que presenta “alto riesgo”, sobre todo sísmico, y en etapas de lluvias tan intensas como la actual que ha provocado inundaciones, ha quedado claro que también hay riesgo de tipo hídrico.
El convenio, remarcó, busca capacitar a más personas con los conocimientos, habilidades y destrezas necesarias para salvar vidas en casos de emergencias y desastres.
“Además, gracias a esta colaboración, se ha consolidado la resiliencia y capacidad de respuesta de la Ciudad de México ante emergencias, desde la atención de incidentes a través del 911 y el C5, hasta la prestación de servicios prehospitalarios. Además, se han impulsado campañas de prevención y simulacros, como el macro simulacro anual, que prepara a la ciudadanía frente a fenómenos como sismos e inundaciones.”