Laura Esquivel (Ciudad de México, 1950) regresa a la literatura infantil con la redición de Estrellita marinera, ahora publicada por Alfaguara, obra que entrelaza aventura, emoción y realismo mágico.
La autora propone adentrarse en la historia de María y Facundo, cuyos caminos se cruzan tras recibir una herencia inesperada: ella recibe una carpa circense y él pasa a trabajar en ella.
Desde ese punto, Esquivel construye un mundo donde la bondad, la compasión y la solidaridad guían las decisiones de los personajes, mientras lo maravilloso se revela como fuerza transformadora.
“Elegí este entorno porque cada vez hay menos espacios donde lo extraordinario, la comunidad y la complicidad puedan florecer”, explicó en entrevista con La Jornada.
“Es como una burbuja dentro de un mundo que racionaliza y mide todo: la fama, los premios, los likes. La verdadera alquimia consiste en reconocer cómo una emoción, una lágrima o una imagen puede transformar la vida de otros de manera profunda y real.
“La obra establece un puente entre emoción y razón, entre infancia y conciencia; demuestra que vida y fantasía pueden coexistir en armonía.”
Uno de los ejes simbólicos más poderosos es la madre de Facundo. Su segunda cabeza adquiere vida gracias a la compasión y las lágrimas.
“Me apasionan las leyendas y relatos espirituales. Kwan Jin, manifestación femenina de Buda, es un referente”, añadió Esquivel.
“Cuando regresa al mundo al escuchar el llanto de alguien que necesita ayuda, esa cabeza simboliza la presencia, el cuidado y la transmisión de amor más allá de la muerte. Representa también la fuerza de la emoción y la empatía en la construcción de la vida y la identidad.”
El tono del texto combina reflexión y juego. “Era esencial ofrecer niveles de lectura: los niños disfrutan la fantasía y la interacción directa con un narrador, mientras los adultos descubren los hilos simbólicos sobre la Madre Tierra, la vida comunitaria y el valor de ser por lo que se es, no por lo que se posee”, subrayó la escritora.
“La voz, que rompe la distancia tradicional, invita a participar, cuestionar e imaginar, como ocurre en el teatro, y convierte la lectura en un diálogo activo con el lector.”
Las ilustraciones de Francisco Meléndez enriquecen la experiencia. “No son meras decoraciones; amplían la historia y estimulan la creatividad.”
La colaboración con Meléndez y el editor Julio Ollero equilibró cada detalle, color y espacio, lo que otorgó a la lectura un carácter de libertad e imaginación. La narrativa y las artes visuales recrean el mundo del circo, las carpas y los personajes fantásticos que habitan la obra, publicada por primera vez en 2000.
Esquivel rememoró su infancia y los espectáculos que la marcaron, desde fantoches hasta programas televisivos de Don Facundo.
“Todo eso se refleja en este ejemplar: los niños encuentran un mundo donde lo fantástico y lo posible conviven, donde las soluciones surgen en comunidad y compartir la vida con todos los seres constituye la verdadera magia”, señaló.
“María descubre que ningún desafío se supera en soledad y que la cooperación y la solidaridad son esenciales para transformar la realidad.”
Reconocida también por Como agua para chocolate, la autora enfatizó la urgencia de preservar la imaginación frente a la tecnología que limita la creatividad.
“Cuando los niños leen, ejercitan un poder que cambia su mundo. Cada página es un acto de descubrimiento. Saber que esto puede vivirse de manera compartida por niños y adultos me llena de alegría.”
El vínculo con los lectores, mediante preguntas y respuestas planteadas por Laura Esquivel, conserva la conexión emocional entre narradora y lector.
“El libro es un llamado a abrir los ojos, a observar cómo cada gesto, cada lágrima y cada imagen puede cambiar la vida de otros. El mundo necesita lectores que imaginen, se conmuevan y actúen con compasión”, puntualizó Laura Esquivel.
“Mi esperanza es que los niños y los adultos se reconozcan en la historia y descubran la fuerza que reside en cada vínculo humano”, concluyó.
El ejemplar será presentado en la librería Rosario Castellanos del Fondo de Cultura Económica (avenida Tamaulipas 202, colonia Hipódromo, alcaldía Cuauhtémoc) el 4 de septiembre a las 19 horas.
La escritora estará acompañada por el poeta y narrador Jorge Luján, quien introducirá la obra y compartirá su visión acerca de la literatura infantil.