Washington. Un juez estadunidense ordenó este miércoles la puesta en libertad bajo fianza del migrante salvadoreño Kilmar Ábrego mientras espera juicio por cargos de contrabando de personas.
Si bien se trata de una victoria legal para Ábrego García, que fue deportado sin un procedimiento completo a El Salvador por el Gobierno del presidente Donald Trump, es probable que sea detenido nuevamente por las autoridades.
El juez de distrito Waverly Crenshaw, en Nashville, confirmó el fallo de un magistrado que indicó que los fiscales no mostraron pruebas suficientes de que Ábrego represente una amenaza para la seguridad pública o corra el riesgo de fugarse.
Es probable que el fallo no conduzca a la liberación de Ábrego de la custodia del gobierno y desencadene una nueva batalla legal sobre si puede ser deportado de nuevo. Sus abogados pidieron la suspensión del fallo durante 30 días, manteniéndolo en detención penal mientras sopesan sus próximos movimientos.
El gobierno de Trump afirmó con anterioridad que si Ábrego era liberado de la custodia penal, sería detenido de manera inmediata y se enfrentaría a una segunda deportación a un país que no sea El Salvador.
Los procedimientos de migración comenzarán de inmediato y podrían conducir a la expulsión de Ábrego de Estados Unidos antes de un juicio penal, indicaron los funcionarios, pese a la promesa anterior del gobierno de que se enfrentaría a la justicia en un tribunal estadunidense.
Ábrego, de 29 años y residente en Maryland, fue deportado y encarcelado en El Salvador en marzo a pesar de un fallo judicial de 2019 que señaló que no podía ser enviado allí debido a un riesgo de persecución de pandillas.
Los abogados de Ábrego han pedido a la juez federal Paula Xinis, de Maryland, que supervisa una demanda civil presentada por su representado, que detenga una potencial segunda deportación. Si bien aún no se ha pronunciado, indicó que está dispuesta a ordenar al menos una breve pausa.