Morelia, Mich. Los sacrificios de Xavier Ovando y Román Gil nunca debieron haber ocurrido, pero “han dado frutos: el pueblo mexicano se movilizó a fuerza de valor y voluntad; elección tras elección y fraude tras fraude”, logró finalmente que a partir de 1997 se contaran bien los votos, señaló Cuauhtémoc Cárdenas al fungir como orador en el 37 aniversario luctuoso de quienes fueran sus colaboradores en el proceso electoral de 1988.
En palacio de gobierno de Morelia, Cárdenas subrayó que al menos desde 1997, no ha habido motivo para impugnar ningún resultado, pero todavía se está lejos de “una elección en que no aparezca el dinero sucio y en la que no se hayan entrometido indebidamente funcionarios, para inclinar resultados”.
Ante familiares de Ovando y del gobernador Alfredo Ramírez, el reconocido político de izquierda apuntó que la lucha de Xavier Ovando y Román Gil, así como de centenares, no solo fue por elecciones sin tacha, sino por una profunda transformación democrática del sistema político y de la sociedad, así como de la economía.
Actualmente, dijo, se tienen dos obstáculos mayores en el país: la insuficiencia de recursos del Estado para invertir en las necesidades sociales como salud, educación y seguridad social, así como en el fomento al desarrollo, mediante políticas que mantengan el crecimiento de la economía. Otro obstáculo, añadió, es la creciente presencia de la delincuencia, que ha afectado a sectores de la población y de la economía.
“Erradicar la inseguridad, la violencia y la delincuencia de la vida cotidiana reclama de una política del Estado en la que, a través de una planeación debidamente concebida e instrumentada, se coordine la participación de los diferentes niveles de gobierno, los tres poderes y la sociedad organizada”, enfatizó Cuauhtémoc Cárdenas.
Es la tarea para los que creen que una democracia amplia y sólida es posible en México, por lo que, al impulsarla, será la mejor forma de cumplir con el legado de Ovando, Gil y todos los caídos en la lucha por un país de leyes y democracia.
En tanto, el gobernador Ramírez Bedolla, hizo hincapié que, gracias a la lucha ejemplar de mujeres y hombres, como los homenajeados es que hoy se construye una sociedad más justa, libre, igualitaria y democrática, Esto “alienta a seguir en la lucha; por eso es que se reivindica su legado y se convoca a mantener vivos sus ideales, a fortalecer las instituciones y a no permitir que el autoritarismo vuelva a poner en riesgo la dignidad del pueblo”.