Rosarito, BC. “Pásele, pásele, todo barato, ya para irnos”, dice Fernando Robles, un emprendedor que vende, mayormente mezcal, frente a la zona de comida del Tianguis Turístico que se realizó en Rosarito, Baja California. Es de Guerrero, y percibe que a esta edición del evento le hizo “falta promoción”.
Por otro lado, alianzas, convenios y anuncios llenan los stands de los expositores, siempre con buena cara. Afirman que es una de las ediciones más exitosas. Esas son dos de las caras que presentó el Tianguis en su edición 49 y que el próximo año, para su 50 aniversario regresa a Acapulco, Guerrero, la tierra que lo vio nacer.
Fernando Robles tiene desde hace cinco años una empresa llamada Casanvi, que se dedica a vender café, miel y mezcal de Guerrero. Ha estado en cinco Tianguis Turísticos y las ventas este año “no van tan bien como el año pasado, pero ahí la llevamos, ya nos vamos y hay que agotar el producto”.
“Lo que se percibe es que le hizo falta promoción al evento, allá (en Acapulco) es toda una fiesta todos los días”, cuenta Fernando Robles.
Un sentimiento similar es el de Justino Damián, de Acatlán, también Guerrero, que ha acudido a diversos Tianguis Turísticos.
“La venta, para ser honestos, está muy baja, yo me dedico a los textiles, camisas, filipinas, vestidos, y cuando es en Acapulco todo mundo se quiere llevar algo de allá, pero aquí (en Baja California) es como que no hay mucha cosa típica y entonces a nosotros se nos acercan, pero no nos compran”.
El Tianguis por primera ocasión tuvo actividades en cuatro sedes a lo largo de la península norte, que fueron Tijuana, Rosarito, Ensenada y Tecate. Ahí estuvieron dispersas ocho mil personas los cuatro días que duró y la transportación es complicada.
Por ejemplo, un taxi de Rosarito a Tijuana cobra 300 pesos, pero a Ensenada mil 500 pesos como tarifa mínima y según la hora.
“El trabajo ahí la lleva, siempre hay que moverse en esta zona, pero no sabía que estaba este evento, no hemos tenido tampoco tanto jale”, cuenta Ángel Montes, un taxista de Tijuana que hizo base el miércoles y el jueves en el Baja California Center (recinto sede del Tianguis) y solamente pudo hacer cuatro viajes.
Al interior del recinto sede el ánimo cambió en los cuatro días de actividades y así lo explicó Juan Pablo, touroperador de Oaxaca que fue en busca de alianzas:
“El lunes cuando todo comenzó se sentía mucha fiesta, todos estaban felices con la inauguración, el martes ya comenzaron las reuniones de negocio, el miércoles comenzó a bajar la gente y el jueves, último día, todos queriendo colocar lo más que se pueda, pero en general siento que fue bueno, como todos los años”.