Cuernavaca, Mor. Integrantes de la asociación Gustavo Salgado Delgado y del Frente Popular Revolucionario (FPR) protestaron frente al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) para exigir al magistrado presidente, Jorge Gamboa Olea, y a los jueces de ese poder, que no liberen al asesino de Gustavo Salgado Delgado, Victorino Marcelino.
Gabriel Rivas Ríos, luchador social y regidor de Cuernavaca, encabezó la manifestación y advirtió que el próximo jueves 20 de febrero, el padre de la titular del Instituto de los Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas de Morelos (IPIAM), Adelaida Marcelino Mateo, solicitó una audiencia ante un juez para que lo deje en libertad, según, porque es adulto mayor y padece una enfermedad.
“La excusa que quieren hacer pasar es que es grande de edad y que está enfermo, pero está sentenciado a 32 años de prisión por el homicidio doloso que cometió contra Gustavo Salgado, y apenas el pasado 4 de febrero se cumplieron 10 años, y faltan 22 años de cárcel”.
“No es posible que pretendan liberarlo y dejarlo que purgue la condena en la comodidad de su hogar”, adelantó el activista.
Ante el intento de querer salir de la cárcel, y del TSJ de ayudar, los integrantes de la organización aseguraron que a partir de hoy se declaran en asamblea permanente y que estarán las veces que sea necesario en protesta frente al TSJ y del palacio estatal; para impedir la salida de los cuatro asesinos de Gustavo Salgado, ultimado el 4 de febrero de 2015 en Ayala.
Rivas Ríos, aseguró, que se enteró de “que Margarita (la gobernadora) pretende liberar a esos asesinos, que primero van por el padre y luego por los demás por la vía del indulto, porque según los considera inocentes”, agregó el dirigente de esta organización.
Ante esto, los compañeros de Gustavo demandaron al titular del TSJ y al juez que le toque revisar la petición que la rechacen.
Gustavo Salgado, dirigente del partido comunista en Morelos, desapareció el 3 de febrero 2015; su cuerpo sin fue encontrado decapitado y sin manos al día siguiente en la comunidad del Chivatero, Ayala.
Según sus compañeros de lucha, el machete con el que le quitaron la vida y lo decapitaron fue encontrado en la casa del padre de Adelaida (también el vehículo en que lo trasladaron y la computadora de Gustavo); por lo cual él (padre de Adelaida), con dos de sus hermanos, y un primo o tío de ésta, fueron sentenciados a 32 años de prisión por el homicidio calificado en contra de Gustavo Salgado Delgado, de 32 años.
