Champigny-sur-Marne. El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió este martes que el agua del río Sena estará "limpia" de cara a los Juegos Olímpicos, con motivo de la inauguración de una planta de tratamiento de aguas pluviales clave para este objetivo.

"Todos juntos movilizados (...) Lo conseguiremos. El agua del Sena estará fría... y limpia", escribió Macron en la red social X. "¡Os lo confirmaré!", agregó, reiterando implícitamente su promesa de bañarse en el Sena.

El Sena acogerá las pruebas de aguas abiertas, rebautizada maratón de natación, y de triatlón durante los Juegos Olímpicos, previstos del 26 de julio al 11 de agosto, aunque la incertidumbre planea sobre si podrán celebrarse allí.

Para garantizar los niveles de calidad del agua aptos para el baño, las autoridades ultiman las infraestructuras puestas en marcha con motivo de los Juegos, con un costo de unos 14 mil millones de euros.

Esta planta, instalada a orillas del río Marne -afluente del Sena con el que confluye a las puertas de París- permitirá depurar las aguas pluviales, que suelen arrastrar a su paso aguas residuales antes de verterlas de nuevo al río.

Poder bañarse en el Marne y en el Sena es "uno de los acontecimientos del siglo" y "estaremos listos a tiempo", declaró la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, durante su inauguración a unos 10 kilómetros al sureste de París.

Esta infraestructura junto al depósito de Austerlitz, en construcción actualmente en el centro de París y cuya inauguración se prevé a principios de mayo, son claves para lograr el objetivo de bañarse en los ríos.

La calidad del agua dependerá sobre todo del tiempo. En caso de fuertes lluvias en los días previos a la pruebas olímpicas, estas podrían aplazarse o anularse, como ya ocurrió durante un ensayo previsto el pasado agosto.