Ciudad de México. Las señales de firmeza económica, que se vuelven a trasladar al producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos al cierre del cuarto trimestre de 2023, así como cifras financieras en los corporativos mixtos, provocan cautela entre los inversionistas, pero con apetito de riesgo.

El avance correspondiente al cuarto trimestre de 2023 reflejó una ralentización del crecimiento intertrimestral de Estados Unidos a 0.8 por ciento. Pero en términos interanuales creció 3.28 por ciento, muy por encima de 1.95 que había estimado el mercado. Así, la economía de Estados Unidos creció 2.54 por ciento en 2023, respecto a 2022, siendo el mayor crecimiento para un año desde 2021.

El PIB de Estados Unidos se desaceleró menos de lo esperado, según la primera estimación publicada este jueves por el Departamento de Comercio; lo anterior, luego de que la economía estadunidense mostró un alza de 4.9 por ciento en el trimestre previo.

En comparación con el tercer trimestre de 2023, el freno del PIB en el cierre del año reflejó principalmente una desaceleración en la inversión privada en inventarios, el gasto del gobierno federal, la inversión fija residencial y el gasto de los consumidores. También redujeron su ritmo las importaciones.

Sin embargo, aunque a un ritmo más lento, la economía del país sigue creciendo, liderada por aumentos en el gasto de los consumidores, las exportaciones, el gasto de los gobiernos estatales y locales, la inversión fija no residencial, el gasto del gobierno federal, la inversión en inventarios privados y la inversión fija residencial, reportó la dependencia estadunidense.

En tanto, durante la primera reunión de política monetaria del año, el Banco Central Europeo (BCE) frenó las expectativas de una inminente baja de tasas de interés. La propia presidenta del BCE, Christine Lagarde, recientemente aplazó ya al verano la fecha probable para el inicio de los recortes de tasas. Hoy el BCE ha confirmado que las tasas de interés seguirán sin cambio, en 4.50 por ciento.

A la espera de la Fed

Ante un incremento del apetito por riesgo tras la publicación del PIB de Estados Unidos correspondiente al cuarto trimestre de 2023, que superó las expectativas del mercado, el peso mexicano se aprecia en la apertura frente al dólar, al ganar 0.15 por ciento, para operar en alrededor de 17.1841 unidades por dólar.

El comportamiento ganador del peso se da mientras el dólar mantiene su fortaleza, pues según el índice ponderado de la divisa, que mide el comportamiento de la moneda frente a una canasta de seis monedas internacionales, se aprecia 0.11 por ciento, a 103.167 unidades.

Tras el rally bursátil con el que Netflix recibió sus cuentas animó al conjunto de la renta variable. Hoy se verá que sucede con Tesla. El fabricante de vehículos eléctricos sufrió caídas a raíz de sus resultados.

El freno de Tesla no evita que Wall Street digiera favorablemente las señales de firmeza económica y la espera de la Reserva Federal (Fed) en su primera reunión de política monetaria del año.

Mientras que los precios del petróleo siguen al alza, en donde el Brent sube 1.64 por ciento, a 81.35 dólares y el WTI tiene un alza de 1.85 por ciento, a 76.50 dólares por barril.