Ciudad de México. Los integrantes de la caravana migrante que llegó ayer a la Ciudad de México toman un momento de descanso tras la exhaustiva ruta que cubrieron en 50 días.
La caravana, conformada sobre todo por migrantes de origen centroamericano, se encuentra por ahora en la Casa del Peregrino San Juan Diego de la alcaldía Gustavo A. Madero, donde llegaron anoche después de visitar la Basílica de Guadalupe.
Decenas de hombres, mujeres y niños -de acuerdo a cifras oficiales son 387 los migrantes que conforman la caravana– evidencian en sus rostros el agotamiento tras el recorrido desde Tapachula, Chiapas hasta la Ciudad de México.
Muchos han aprovechado para descansar sobre colchonetas o camastros colocados en el lugar para su reposo, otros más se han dado rápidos duchazos junto a gigantescos tinacos de agua, y otros juegan con sus niños.
En la Casa del Peregrino hay apoyo del personal de la alcaldía, así como de las comisiones de derechos humanos nacional y de la Ciudad de México.
Irineo Mujica, de la organización Pueblo sin Fronteras y líder de la movilización, aseveró que esta tarde se reunirán con diversas organizaciones para definir las siguientes acciones de la caravana así como para buscar apoyo y una posible reunión con las autoridades.
