Ciudad de México. El 32.2 por ciento de los 5.6 millones de personas que se estima viven con diabetes y son beneficiarios del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), no reciben atención en dicha institución, debido, entre otras razones, a que la cobertura efectiva está limitada por la detección y el acceso a que los pacientes no acuden por los tiempos de espera para las citas, por la falta de confianza o prefieren atenderse en un consultorio particular, señaló el investigador Miguel Ángel González Block, de la Universidad Anáhuac.
Al presentar su investigación “La Innovación hacia el modelo de atención crónica de las personas que viven con diabetes”, el titular de la cátedra Becton Dickinson de Investigación en Sistemas de Salud, expuso que dicho porcentaje se ha mantenido ligeramente estable de 2016 a 2018 y “esta situación no ha cambiado fundamentalmente a 2021”.
Indicó que de 100 por ciento de la población beneficiaria del IMSS, alrededor de 30.8 millones, 49 por ciento, accede a una prueba de detección oportuna para la diabetes y sólo 26 por ciento logra el diagnóstico confirmatorio.
González Block dijo que de las personas con diabetes que logran una continuidad en la atención, que son 3.2 millones, 100 por ciento tienen cuatro o más consultas por año en el IMSS, 80 por ciento recibe medicamentos y 90 por ciento de quienes requieren terapia de insulina se les brinda. El 40 por ciento logra adherencia efectiva a las consultas, 36 por ciento reciben una revisión completa.
Destacó que para brindar una mejor atención, el IMSS está innovando un Modelo Preventivo de Enfermedades Crónicas (MPEC) enfocado en este padecimiento, que está en una fase piloto desde 2017 y el cual pretende expandir.
Explicó que el MPEC apunta al triple reto de incrementar el alcance de la atención, mejorar la calidad y reducir los costos. Entre las estrategias está la estratificación de riesgos, la focalización de acciones y el seguimiento.