Ciudad de México. Los daños económicos globales ocasionados por catástrofes en 2019 ascendieron a 146 mil millones de dólares mientras que los daños asegurados fueron de 60 mil millones, según el Informe Sigma del Swiss Re Institute.
De acuerdo con el estudio: “Catástrofes naturales en tiempos de acumulación económica y cambio climático”, señala que el calentamiento global ocasionará un aumento de la intensidad y la frecuencia de fenómenos meteorológicos severos y también mayor incertidumbre en su evaluación.
El Grupo Swiss Re, proveedor líder a nivel mundial de reaseguros, seguros y otras formas de transferencia de riesgos basadas en los seguros precisó que a nivel mundial, los daños económicos generados por catástrofes naturales y siniestros resultantes de la actividad humana con efectos en la naturaleza (antropógenos) en 2019 ascendieron a 146 mil millones de dólares, por debajo de los 176 mil millones en 2018 y del promedio anual de los 10 años anteriores de 212 mil millones de dólares.
El sector del seguro en el mundo cubrió daños por valor de 60 mil millones de dólares, una cantidad inferior a los 93 mil millones en 2018 y 75 mil millones de dólares como promedio en los 10 años anteriores.
Aunque los fenómenos meteorológicos severos continuaron siendo el principal contribuyente a los daños totales en 2019, amplificados por los desarrollos socioeconómicos en zonas afectadas y los efectos del cambio climático, el descenso de los daños se debe principalmente a la ausencia de grandes y costosos huracanes en Estados Unidos.
Detalló que los daños económicos en 2019, 137 mil millones de dólares fueron originados por catástrofes naturales y los 9 mil millones restantes fueron causados por siniestros antropógenos.
De los 60 mil millones de dólares de daños asegurados, las catástrofes naturales representaron 52 mil millones.
Los mayores eventos de daños del sector en 2019 se produjeron en zonas desarrolladas y densamente pobladas de Japón: el tifón Faxai en septiembre (daños asegurados de 7 mil millones de dólares), seguido del tifón Hagibis en octubre (daños asegurados adicionales de 8 mil millones de dólares).
Los riesgos climáticos continúan siendo asegurables, pero las aseguradoras deben ser cautelosas respecto a los registros históricos de daños a la hora de crear modelos de riesgo para tener en cuenta las tendencias climáticas y socioeconómicas.
Advirtió, que si no se toman medidas tangibles inmediatas para hacer frente al aumento de las temperaturas, es probable que los sistemas climáticos alcancen puntos de inflexión irreversibles.