La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, acusó a Amazon de tomar un "acto hostil y político" y atacó aún más a la compañía sugiriendo que era antiestadunidense.
Las personas detenidas, casi todas en la frontera con México, son obligadas a bajar la aplicación. Activistas señalan que la medias viola su privacidad.