Las mujeres aún están subrepresentadas en los espacios de liderazgo y en la propiedad de las empresas, concluye el estudio “Radiografía del emprendimiento en México” edición 2025, realizado por la Asociación de Emprendedores de México (ASEM) con el apoyo de EY.
En 2 de cada 3 empresas, las mujeres no ocupan posiciones de dirección, y menos de la mitad del capital social del 77 por ciento de las empresas pertenece a las mujeres.
“Esto limita su influencia en el desarrollo económico del país, en un contexto en el que, por un lado, uno de cada tres hogares en México está encabezado por una mujer, y por otro lado, 2.3 millones de mujeres en el país desean trabajar pero no pueden hacerlo debido a que deben cuidar a niñas, niños, personas mayores o con discapacidad”, destacó la Asociación al retomar datos del INEGI.
En el estudio se menciona que la carga de cuidados, históricamente invisibilizada y asumida de manera desproporcionada por las mujeres, limita su participación en el mercado laboral y en la vida empresarial, dado que 52 por ciento de las mujeres fundadoras de empresas que son madres son también las principales cuidadoras de sus hijos e hijas.
La situación influye en que la falta de disponibilidad de tiempo sea uno de los motivos de fracaso más importantes de las empresas fundadas por mujeres.
A pesar de estos obstáculos, las mujeres emprendedoras se distinguen por su creatividad y capacidad de adaptación, señala el estudio de ASEM.
“Las empresas fundadas por equipos mixtos promueven entornos más diversos, que aprovechan oportunidades de negocio innovadoras como el comercio electrónico y las ventas a otros países”, se menciona en el análisis.
En ese documento se expone que la creciente digitalización de los negocios ha abierto nuevas posibilidades para las mujeres emprendedoras: 81 por ciento de las empresas que venden exclusivamente por internet fueron fundadas por equipos mixtos de hombres y mujeres, lo que evidencia los beneficios de la colaboración y la diversidad en los proyectos empresariales.
A su vez, una de cada cuatro personas morales conformadas únicamente por socias y que operan en el entorno digital, comercializa exclusivamente por internet, lo que muestra que las mujeres están aprovechando los entornos tecnológicos para innovar, adaptarse a los nuevos modelos de consumo y posicionarse en el mercado.
“Estos datos subrayan la importancia de impulsar una mayor participación de las mujeres en la propiedad y dirección de las empresas, no solo para alcanzar una mayor equidad, sino como una estrategia de desarrollo económico sostenible”, sostuvo la Asociación en su estudio.
Expuso que es necesario promover políticas que incentiven la creación de equipos mixtos, el acceso de las mujeres a financiamiento y a herramientas digitales resulta esencial para fortalecer su papel en la economía.
“Incorporar más mujeres en los espacios de decisión empresarial, ya sea como fundadoras, socias o directoras, es una oportunidad para construir organizaciones más competitivas, inclusivas e innovadoras, capaces de responder a los desafíos del entorno global”, aseguró el organismo.