Nuevo Laredo, Tamps. Más allá de una simple recomendación médica, la lucha contra la hepatitis debe convertirse en una acción colectiva y constante, advirtió el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tamaulipas, al destacar que esta enfermedad continúa representando un riesgo significativo para la salud pública, especialmente en comunidades con acceso limitado a agua potable y saneamiento adecuado.
El llamado fue realizado por el doctor Alejandro Soto Villa, director del Hospital General de Zona (HGZ) No. 11, quien subrayó que los casos de hepatitis, aunque prevenibles, siguen apareciendo en gran parte por la falta de información y de medidas comunitarias de prevención.
“La hepatitis no se limita a una responsabilidad individual, sino que debe abordarse como un tema de salud colectiva”, afirmó Soto Villa. “Desde la forma en que manipulamos los alimentos hasta cómo cuidamos nuestro entorno, todo influye en la posibilidad de propagar este virus”.
El especialista detalló que existen tres tipos principales de hepatitis: A, B y C. La tipo A, común en temporadas de calor y lluvias, se relaciona con alimentos y agua contaminada. Las variantes B y C, aunque menos visibles inicialmente, son más peligrosas y pueden derivar en cirrosis o cáncer hepático si no se detectan y tratan a tiempo.
El IMSS enfatizó la necesidad de reforzar la higiene personal y doméstica, con medidas como el lavado frecuente de manos, la correcta desinfección de frutas y verduras, así como la cocción adecuada de alimentos, en especial mariscos. Además, pidió prestar atención a la proliferación de mosquitos, que pueden contribuir indirectamente a la diseminación de enfermedades hepáticas y otras infecciones.
“No basta con lavarse las manos si el entorno sigue contaminado”, señaló el doctor. “Es indispensable trabajar en conjunto, desde las autoridades hasta las familias, para crear ambientes seguros y saludables”.
La institución instó a la población a no ignorar señales como fatiga persistente, pérdida del apetito, náuseas, diarrea o ictericia (coloración amarillenta de piel y ojos), y buscar atención médica inmediata ante cualquier sospecha.
Finalmente, el IMSS reiteró su compromiso de fortalecer las campañas de vacunación —particularmente contra la hepatitis A y B— y de educación comunitaria como parte de una estrategia más amplia para reducir el impacto de esta enfermedad en la región.