Jerusalén. Las fuerzas israelíes bombardearon ayer los suburbios de la ciudad de Gaza desde aire y tierra, donde destruyeron casas y expulsaron a más familias del área, mientras el gabinete de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu se prepara para discutir un plan destinado a la toma la ciudad.
Los residentes de Jeque Radwan, uno de los barrios más grandes de la gobernación de Gaza, indicaron que el territorio fue objeto de embates de tanques y aviones de guerra israelíes ayer y antier, lo que obligó a las familias a buscar refugio en las zonas occidentales de la ciudad.
“Se están arrastrando hasta el corazón de la ciudad, donde se refugian cientos de miles de personas que provienen de este, norte y sur, mientras bombardean esas zonas desde el aire y la tierra para asustar a la gente y que se marche”, expuso Rezik Salah, padre de dos hijos y vecino del Jeque Radwan.
Aproximadamente la mitad de los más de 2 millones de habitantes del enclave costero se encuentran actualmente en la ciudad de Gaza; asimismo, se calcula que varios miles emigraron a las zonas central y sur del enclave, de acuerdo con fuentes locales.
Un niño fue asesinado por disparos israelíes en Al Qarara, en el norte de Jan Yunis, reportó el complejo médico Nasser de la ciudad de Gaza; a su vez, varias personas resultaron heridas, reportó la agencia de noticias palestina Sanad.
Otra persona falleció y varias están heridas tras una embestida de la aviación israelí en el campo de desplazados de Al Bureij, en el centro del enclave palestino, notificó el hospital de los Mártires de Al Aqsa.
En el corredor Netzarim, una zona militar israelí que divide Gaza, testigos aseguraron que tropas de Tel Aviv abrieron fuego contra multitudes cuando acudían por alimentos, a lo que Fundación Humanitaria de Gaza (FHG) aseguró a la agencia Ap que no hubo “ningún incidente en o cerca de nuestro sitio hoy”. Ni la organización ni el ejército israelí respondieron a preguntas sobre las muertes.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) advirtió que la nueva embestida militar de Tel Aviv bloquea aún más la entrada de asistencia humanitaria, en momentos que la hambruna se extiende en el enclave y agrava la situación.
La suma de los muertos
Las autoridades sanitarias locales informaron que los disparos y ataques israelíes mataron al menos a 78 personas ayer, incluidas 33 que intentaban obtener alimentos cerca de un puesto de ayuda en el centro de la franja de Gaza, y al menos dos en una casa en la ciudad de Gaza.
El ministerio de Salud elevó el balance de víctimas a 63 mil 459 palestinos abatidos y 160 mil 256 heridos o mutilados desde el 7 de octubre de 2023.
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, aseguró que “el portavoz terrorista de Hamas, Abu Obeida, fue eliminado en Gaza y se unió a los otros (individuos) eliminados del eje del mal de Irán, Líbano y Yemen en lo más profundo del infierno”; también, añadió que el oficial que representaba a las brigadas Qassam murió en combate. El reporte no fue confirmado ni desmentido por Hamas.
Horas antes y en declaraciones realizadas durante su reunión semanal con su gabinete, el premier israelí sostuvo que el intento de asesinato de Obeida lo realizó la agencia de seguridad interna Shin Bet y las fuerzas de defensa.
“Aún desconocemos el resultado final”, declaró Netanyahu tras agregar: “espero que ya no esté con nosotros, pero observo que del lado de Hamas no hay nadie con quien hablar sobre este asunto”.
Israel considera la anexión de Cisjordania reocupada como respuesta al reconocimiento por Francia y otros países de un Estado palestino, según tres funcionarios de Tel Aviv.
Un portavoz del ministro israelí de Asuntos Exteriores, Gideon Saar, no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters sobre si Saar discutió la medida con su par estadunidense Marco Rubio durante su visita a Washington la semana pasada.
No está claro dónde y cuándo se aplicaría exactamente una medida de este tipo, si sólo en los asentamientos israelíes o en algunos de ellos, o en zonas concretas de Cisjordania reocupada como el valle del Jordán, ni si tras las conversaciones se daría algún paso concreto, que probablemente llevaría un largo proceso legislativo.
En tanto, un plan de posguerra para el enclave palestino circula dentro de la administración del presidente Donald Trump que vería a Estados Unidos administrar el enclave devastado por la guerra durante al menos una década, la reubicación de la población de Gaza y su reconstrucción, publicó de The Washington Post.
La iniciativa, planteada en un documento de 38 páginas, confirmado por el diario estadunidense, prevé la desplazamiento temporal de los más de 2 millones de habitantes de Gaza. De igual manera, un fideicomiso ofrecería a quienes posean terrenos un token digital (código único) a cambio de derechos para reurbanizar su propiedad; además, cada palestino que quiera desplazarse recibiría 5 mil dólares en efectivo y subsidios para cuatro años de alquiler en otro lugar.